Las ocupaciones y huelgas responden al descontento de los jóvenes con los resultados del trabajo del Consejo Asesor Presidencial de Educación, creado por la mandataria Michelle Bachelet en mayo pasado para estudiar reformas profundas al sistema educacional del país.
Los secundarios estiman que el gobierno no ha respondido cabalmente a varios de los puntos de la llamada “agenda corta” (como pases escolares, alimentación y becas), en tanto en temas que se consideran “simples” se ha avanzado muy poco.
El vicepresidente del Centro de Alumnos del Instituto Nacional, Sebastián Muñoz, explicó que con la toma del establecimiento educativo esperan que las autoridades del sector “hagan un reconocimiento de las promesas incumplidas en el año 2002”.
A la eliminación de la Ley Orgánica Constitucional de la Enseñanza (LOCE) los jóvenes agregan en su reclamos reformular el Consejo Asesor, que el Estado asuma la administración de los establecimientos municipales, y replantear la Prueba de Selección Universitaria (PSU).
Uno de los voceros del liceo Confederación Suiza, Gonzalo Celis, afirmó que “es una falta de respeto hacia nosotros, porque lo que entrega eso (el informe del Consejo Asesor) es lo mismo que habíamos sacado por conclusión nosotros con anterioridad”.
Los establecimientos en paro son los mismos que en mayo y junio pasados lideraron las movilizaciones secundarias (a las que se unieron universitarios y profesores) más masivas de los últimos 30 años, y que forzaron la primera crisis del gobierno de Michelle Bachelet.
Ante la nueva arremetida, el secretario ministerial de Educación, Alejandro Traverso, advirtió que de mantenerse la situación es posible que las clases se extiendan hasta enero en aquellos colegios que han paralizado actividades.
La ministra de Educación, Yasna Provoste, que sustituyó a Martín Zilic hace apenas tres meses, dijo que las nuevas movilizaciones “no se justifican, porque en un determinado momento tomamos un conjunto de decisiones” para mejorar las condiciones de los estudiantes.
Provoste desestimó también las críticas hacia el Consejo Asesor, al destacar que el trabajo de este organismo aún no ha concluido. “El plazo es hasta el 11 de diciembre y uno debe ser capaz de plantear inquietudes por vías de la negociación y no de la fuerza”, recalcó.
“Yo siento que los estudiantes secundarios y también los universitarios que participan en él han hecho un gran esfuerzo por transmitir (sus) preocupaciones y planteamientos”, sostuvo la secretaria de Estado.
La Asamblea Nacional Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ANCES), organismo rector del movimiento, decidirá el próximo sábado si se mantiene dentro del Consejo Asesor o retoma las movilizaciones nacionalmente.
Los dirigentes de la organización, que encabezó los paros anteriores, han estado recorriendo el país en busca de apoyo a sus planteamientos, que son precisamente dejar el Consejo -al que critican por la lentitud en sus avances- y coordinar una nueva huelga.
Cerca de las 20 horas de anoche un grupo de 50 estudiantes se tomaron las dependencias de la Secerteria Ministerial de Educación de Santiago.
Tras permanecer por cerca de tres horas, los secundarios fueron desalojados y detenidos por la policía de Carabineros.
Mientras tanto, el Colegio de Profesores (CP) adelantó que si los secundarios deciden ir a un paro pedirá el respaldo del “bloque social” que incluye a distintos gremios (también a los docentes) y a los universitarios.
El Magisterio dio de plazo al gobierno hasta el 16 de octubre para que haga una propuesta satisfactoria, de lo contrario irán a paro indefinido a partir del día siguiente.
Santiago de Chile, 11 de octubre 2006
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