Esta reúne las difíciles lecciones aprendidas en Irak y pone el bienestar y la protección de civiles como un elemento base de la estrategia militar. De esta manera, los genocidas y torturadores del Pentágono aparecen convertidos en ángeles para favorecer las aspiraciones republicanas en las proximas elecciones congresionales de noviembre. ¡Cosas veredes!.
La doctrina, según el periódico The New York Times, hace un señalamiento en contra de algunas de las prácticas utilizadas al inicio de la guerra en Irak cuando el ejército operó sin una guía contrainsurgente efectiva, y advierte en contra de los ataques excesivamente agresivos y del maltrato de los detenidos, menciona el reporte.
Subraya la importancia de proteger a los civiles y de restaurar los servicios esenciales, así como del rápido desarrollo de las fuerzas de seguridad locales.
La nueva doctrina es parte de un amplio esfuerzo para cambiar la cultura de un ejército que por mucho tiempo ha promovido las virtudes del uso de las armas de fuego y maniobras en el campo de batalla en operaciones rápidas y decisivas en contra de un enemigo convencional.
La doctrina está asentada en un nuevo manual de campo sobre contrainsurgencia, que se publicará el próximo mes, informa el New York Times, el cual obtuvo recientemente textos de los documentos no clasificados.
En lugar del uso masivo de armas de fuego para destruir a las tropas de la Guardia Republicana Iraquí y de otras fuerzas enemigas, que se que fue necesario en las primeras semanas de la invasión a Irak, el manual subraya la importancia de minimizar las víctimas civiles. A medida que se usa más fuerza, ésta resulta menos efectiva , comenta el manual.
Al indicar la necesidad de interactuar con la población local para obtener información de inteligencia y entender las necesidades civiles, la doctrina previene en contra de agazaparse en grandes bases.
A medida que más proteges tu fuerza, menos seguro eres tú , señala el periódico citando la doctrina.
El mando actual del ejército de EEUU en Irak ya ha adoptado muchas de las ideas de esta doctrina, pero algunos expertos militares cuestionan si el Ejército y la Marina tienen suficientes tropas para poner en práctica eficazmente la doctrina mientras al mismo tiempo se preparan para otras amenazas, comenta el reporte.
Santiago de Chile, 6 de octubre 2006
Crónica Digital/Argenpress/The New York Times , 0, 107, 2