Naciones Unidas. El Consejo de Seguridad ratificó hoy su respaldo al plan del enviado especial de la ONU para Siria, Kofi Annan, en medio de diversos movimientos que promueven nuevas acciones internacionales referidas al conflicto en ese país.
El órgano encargado de la paz y la seguridad se reunió este jueves con el emisario para analizar la situación y discutir pasos posteriores que conduzcan al cese de la violencia y el inicio de un diálogo para un arreglo pacífico del conflicto.
Tras ese encuentro, Annan afirmó ante los periodistas que su plan de seis puntos no está muerto y llamó a buscar las vías para su implementación y a presionar para que se cumplan los compromisos contraídos.
Reveló la existencia de una iniciativa para crear un grupo de contacto para Siria con países que tienen influencia sobre las partes involucradas en el problema e impulsar la aplicación del plan de seis puntos o decidir acciones en caso de que sea imposible su ejecución.
Ese mecanismo pudiera elaborar incluso una hoja de ruta para el conflicto, precisó el diplomático ghanés, quien reiteró su rechazo a una intervención extranjera en Siria porque “una militarización del problema tendría consecuencias desastrosas”.
Al respecto, el embajador de Rusia ante la ONU, Vitaly Churkin, quien participó en la reunión del Consejo de Seguridad con Annan, reafirmó la propuesta de Moscú para celebrar una conferencia internacional sobre Siria.
Dijo que esa idea está en línea con la de integrar un grupo de contacto y que en ese proceso deben participar Irán, los países vecinos de Siria y todos los relacionados con el conflicto.
El diplomático criticó a quienes promueven la aplicación de sanciones contra el gobierno de Damasco, “pero no proponen nada que presione a los grupos armados de oposición para obligarlos a dialogar para un arreglo pacífico”.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, consideró que la situación en Siria puede pasar en cualquier momento de “un punto crítico a un punto de ruptura”.
El peligro de una guerra civil total es inminente y real, con catastróficas consecuencias para ese país y la región, opinó.
Al respecto, dijo que el gobierno ha cumplido muy poco de lo acordado con el plan de Annan, mientras que la oposición endurece su postura y refuerza su línea armada y los terroristas explotan el caos existente.
No obstante, reafirmó que el plan de Annan permanece en el centro de todos los esfuerzos y “nosotros continuamos apoyándolo”.
Ban Ki-moon también reforzó la orientación internacional de las acciones en torno a Siria al anunciar que discutirá la situación durante la próxima reunión del Grupo de los 20 (G20), a celebrarse en Los Cabos, México.
Nadie puede predecir cómo evolucionará la crisis en Siria y debemos estar preparados para cualquier eventualidad y responder a los muchos escenarios posibles, insistió.
Naciones Unidas, 8 de junio 2012