El papa Francisco se mantiene hoy hospitalizado en el Policlínico Gemelli, en Roma, donde fue ingresado el pasado 14 de febrero, y las pruebas médicas realizadas mostraron infección polimicrobiana del tracto respiratorio.
De acuerdo con un comunicado de la oficina de prensa de la Santa Sede, divulgada en el sitio digital del diario Vatican News, esos exámenes mostraron un cuadro clínico complejo, lo que motivo la decisión de los especialistas de prolongar el ingreso del Pontífice, para garantizar su reposo y la aplicación de un tratamiento médico adecuado.
“El Papa ha descansado, esta mañana se ha despertado, ha desayunado y se ha dedicado a leer algunos periódicos como hace habitualmente”, señaló en declaraciones a la prensa el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, quien precisó que el Santo Padre se encuentra tranquilo, de buen ánimo, y respira por sí mismo.
A pesar de su enfermedad, el Obispo de Roma mantiene desde el hospital la atención a los diversos asuntos que le competen en su calidad de máxima autoridad de la Iglesia católica, y la víspera sostuvo alrededor de las 20:00 hora local su habitual contacto con la parroquia de la Sagrada Familia, en Gaza.
El sacerdote argentino Gabriel Romanelli, párroco de esa iglesia, informó que, como ocurre diariamente desde el inicio del conflicto en Medio Oriente, recibió una videollamada de Francisco, quien “nos preguntó cómo estábamos, nos agradeció las oraciones, y nos dio su bendición”.
“El Papa parecía cansado, pero su voz era fuerte y clara”, apuntó Romanelli.
Debido a su estado de salud, el Sumo Pontífice delegó en el monseñor Rino Fisichella, Proprefecto del Dicasterio para la Evangelización, la celebración de la Santa Misa con ocasión del Jubileo de los Diáconos, prevista el domingo 23 de febrero, a las 09:00 hora local, en la Basílica de San Pedro, informó la oficina de prensa vaticana.
Ciudad del Vaticano, 18 febrero 2025
Crónica Digital/PL
