La consolidación del Partido de extrema derecha Republicano como primera fuerza política de Chile y la elevada cifra de votos en blanco y nulos caracterizaron las elecciones para el Consejo Constitucional de este país.
El partido fundado y dirigido por José Antonio Kast, una de las figuras de la ultraderecha regional, consiguió 22 escaños en el organismo que estará a cargo de redactar la futura Carta Magna, destinada a sustituir la impuesta en 1980 por la dictadura militar.
Si bien no alcanzó por sí solo las dos quintas partes de los 50 miembros del Consejo, ya recibió el apoyo de la coalición de derecha Chile Seguro, cuyos 11 puestos le permiten la mayoría necesaria para incorporar conceptos al texto sin necesidad de negociar.
De esta manera, las fuerzas más conservadoras tendrán a su cargo redactar la ley fundamental para sustituir a la emanada del régimen golpista de Augusto Pinochet (1973-1990).
La paradoja es que el Partido Republicano se negó a firmar el llamado Acuerdo por Chile, que permitió continuar el proceso tras el revés del plebiscito de septiembre de 2022, cuando la mayoría de los votantes rechazó un primer proyecto constitucional.
Como segunda fuerza en el Consejo quedó la alianza Unidad para Chile, formada por los partidos Comunista, Socialista, Liberal, la Federación Regionalista Verde Social y el Frente Amplio, todos miembros del Gobierno, que logró 17 representantes.
La otra coalición oficialista denominada Todo por Chile, que insistió en competir sola, terminó con 8,97 puntos y ningún consejero, suerte similar a la corrida por el Partido de la Gente, cuyo líder Franco Parisi, abandonó el país esta misma noche.
A estos 50 consejeros constitucionales se suma uno más en representación de las comunidades indígenas, un sector marginado en este proceso, porque sólo se le permitió inscribir a dos candidatos a pesar de representar el 12 por ciento de la población chilena.
Otro dato importante de la jornada fue el elevado número de votos en blanco y nulos, fruto de la escasa motivación de una parte de la población y el desconocimiento de los candidatos en pugna.
Según el Servicio Electoral, el 4,55 por ciento de los electores depositaron su boleta en blanco y 16,94 la anularon, a los cuales habría que sumar el elevado número de quienes se excusaron de participar.
Al final de la jornada, el presidente Gabriel Boric reconoció los resultados y llamó a los elegidos a actuar con sabiduría y moderación y a utilizar el diálogo como medio de superar las diferencias.
«El proceso anterior fracasó porque no supimos escucharnos entre quienes pensábamos distinto. Quiero invitar al Partido Republicano, que ha obtenido una mayoría incuestionable, a no cometer el mismo error”, dijo el gobernante.
Los miembros del Consejo Constitucional ocuparán sus cargos el 7 de junio y el resultado de su trabajo será sometido a plebiscito el 17 de diciembre venidero.
Santiago de Chile, 8 de mayo 2023
Crónica Digital/PL
