“Es un gran hito. Los neozelandeses han logrado una vez más, a través de sus acciones, aplastar al virus. Los sistemas que hemos desarrollado y reforzado desde la primera ola de COVID–19 han sido efectivos para seguir al virus, aislarlo y eliminarlo”, informó el Ministro de Salud, Chris Hipkins, al informar que se dio de alta al último paciente con coronavirus que se había contagiado a través del brote local detectado a mediados de agosto.
Desde la medianoche del miércoles, Auckland, la ciudad más poblada del país, ha regresado a la normalidad luego de que un rebrote obligó a las autoridades a decretar un nuevo confinamiento a mediados de agosto. En ese momento, Nueva Zelanda había logrado estar 102 días sin casos.
Ahora quedan en el país 37 casos activos, los que fueron catalogados como importados. El ministro Hipkins señaló en un comunicado que se espera que el brote de Auckland sea “cerrado” en cuatro semanas (o dos periodos de incubación del nuevo coronavirus) si no se registra ninguna infección a partir de este foco.
Nueva Zelanda celebrará elecciones generales el próximo 17 de octubre y la Primera Ministra, la laborista de izquierda Jacinda Ardern, es la candidata favorita.
Wellington, 8 de octubre 2020.
Crónica Digital.