La elección de Kamala Harris como compañera de fórmula de Joseph Biden, el más probable candidato demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, es la noticia que acaparó titulares aquí en la semana que concluye.
Los medios informativos destacaron la elección histórica de que por primera vez una mujer afroamericana y además con raíces asiáticas llegue a integrar el binomio por uno de los principales partidos políticos del país.
Las protestas contra el racismo y la brutalidad policial en Estados Unidos, tras el asesinato del afroamericano George Floyd, impulsaron la nominación de Harris como compañera de fórmula de Biden a las elecciones del 3 de noviembre. Al anunciar su decisión este 11 de agosto, quien fuera Vicepresidente de Barack Obama escuchó, en medio de la efervescencia social, el reclamo generalizado de elegir a una mujer negra para completar el binomio si quería ganar en los venideros comicios.
Según el virtual aspirante demócrata, su exrival en las primarias es simplemente la mejor preparada para ayudarle a derrotar a Donald Trump y dirigir una nación impactada por la peor pandemia sanitaria en 100 años, la devastadora crisis económica y la división racial.
Hija de inmigrantes, Harris, de 55 años, fue la primera mujer negra en ser Fiscal General de California y la segunda en llegar al Senado, en las elecciones de noviembre de 2016. Hay quienes incluso la consideran la “versión femenina” de Obama.
Robert Shrum, director del Centro para el Futuro Político de la Universidad del Sur de California, opinó que la elección de la abogada, ante todo, abordaría una de las razones por las que Hillary Clinton perdió frente a Trump hace cuatro años. “Uno de los problemas en 2016 fue la caída del voto afroamericano en Wisconsin, Michigan y Pennsylvania”, señaló.
Aunque Biden goza de popularidad entre los votantes negros, que apuntalaron su victoria en las primarias del Partido Demócrata, movilizar a ese sector del electorado es clave en la conquista de la Casa Blanca. Harris “será una gran motivadora” para ese propósito, vaticinó el representante James Clyburn, de Carolina del Sur.
La senadora podría convertirse en la primera mujer en ocupar la Vicepresidencia de Estados Unidos y ya hizo historia al ser la única afronorteamericana en figurar, hasta ahora, en la boleta electoral de una de las dos principales fuerzas políticas del país del norte.
La apuesta de Biden con Harris apunta a movilizar a electores que le ayuden a inclinar la balanza a su favor como los afroamericanos, los inmigrantes y otras minorías, así como las mujeres, particularmente en Estados indecisos.
Mientras, una encuesta nacional realizada por la Universidad de Monmouth y publicada el 11 de agosto ratificó la ventaja de dos dígitos de Biden (51 por ciento) sobre Trump (41).
Por otra parte, políticos demócratas, organizaciones ciudadanas y figuras del espectáculo, entre otros, celebraron la decisión del postulante de escoger a la senadora.
Otras mujeres progresistas felicitaron a Harris, entre ellas la representante Karen Bass, quien la calificó como una gran elección. De su lado, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton señaló en su cuenta de Twitter que está encantada de darle la bienvenida a una histórica candidatura del partido azul.
La reacción de Trump fue dar credibilidad a una intriga racista sobre Harris, para cuestionar si la senadora de California es elegible al cargo de Vicemandataria de Estados Unidos, lo que sumó a otras aseveraciones falsas y sexistas en redes sociales y páginas conservadora.
Harris nació en Oakland, lo que la convierte en ciudadana nata y la hace elegible para ser Presidente o Vicepresidente, a pesar de lo cual Trump trató de promover una campaña de desinformación muy similar a la que usó para propulsar su ascenso en la política.
Los comentarios de Trump llegaron en respuesta a un reportero durante una conferencia de prensa la noche del jueves cuando se refirió a una reciente columna de John Eastman, un abogado ultraconservador, que puso en duda el estatus de ciudadanía de los padres inmigrantes de Harris.
“Acabo de escuchar eso. Hoy he oído que ella no cumple con los requisitos”, dijo Trump. Y agregó “por cierto, el abogado que escribió ese artículo es un abogado muy calificado y talentoso”. Añadió: “No tengo ni idea de si correcto. Habría asumido que los demócratas lo habrían comprobado antes de que fuera elegida para ser vicepresidenta”, continuó. “No sé nada de eso. Acabo de enterarme”, insistió.
No pocos recordaron que Trump estuvo detrás del llamado “movimiento Birther”, es decir, la invención que cuestionó la ciudadanía estadounidense de Barack Obama, el primer mandatario negro que llegó a la Casa Blanca.
Trump, quien marcha detrás de Biden en las encuestas, ha visto erosionarse su posición entre las votantes femeninas de todas las edades durante su mandato. Por lo que insultos y falsas insinuaciones relacionadas con la raza y el género podrían perjudicar más su atractivo entre las electoras de los suburbios, que le ayudaron a ganar en estados clave en 2016 y que constituyen campo de disputa ahora.
Washington, 16 de agosto 2020.
Crónica Digital / PL.