‘El Gobierno de Guatemala, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, solicitará una investigación clara y resguardando el debido proceso sobre este caso a las autoridades estadounidenses’, informó la cancillería en un comunicado.
Según fuentes migratorias, el niño había sido trasladado el 24 de diciembre a un centro médico por presentar síntomas de resfrío y los médicos le recetaron ibuprofeno y amoxicilina.
Posteriormente comenzó con náuseas y vómitos y debió ser llevado de nuevo al hospital, donde falleció poco antes de la medianoche.
El Procurador de los Derechos Humanos de Guatemala, Jordán Rodas, solicitó a la representación consular de su país en Estados Unidos acompañar las investigaciones para verificar si el trato recibido y la atención proporcionada al menor fallecido fue la adecuada.
Mediante un comunicado de prensa, el magistrado de conciencia pidió a Estados Unidos garantizar el bienestar y la integridad de los menores migrantes.
Jordán lamentó que en apenas 17 días fallecieran dos niños bajo custodia de las autoridades fronterizas norteamericanas.
Guatemala, 27 diciembre 2018
Crónica Digital /PL