La diputada y Presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara, Cristina Girardi, se refirió a la decisión de la Comisión de Constitución del Senado de declarar “inconstitucional” -por tres votos contra dos- el proyecto Aula Segura, señalando que “me parece muy bien, ya que esta iniciativa no respetaba el debido proceso, y estaba atentando contra las garantías constitucionales que establece nuestra legislación”.
Cabe señalar que este proyecto de ley busca dotar de facultades a directores de establecimientos para que cancelen la matrícula o expulsen de manera inmediata a quienes incurran en hechos de violencia grave.
“Esto lo habíamos conversado con la senadora Yasna Provoste que es la Presidenta de la Comisión de Educación del Senado, que es por donde ingresó este proyecto. Ella derivó el proyecto a Constitución porque hubo un acuerdo unánime que aquí se vulneraba el debido proceso, y esto fue ratificado por la Comisión de Constitución”, explicó la diputada Girardi.
La parlamentaria indicó que “nosotros siempre dijimos que está facultad ya existe, de echar a un alumno por situaciones que afecten la integridad física de algún miembro de la comunidad escolar. Dijimos que lo único que hacía este proyecto era acelerar el proceso, y en esto de echar en cinco días a un alumno, no se respeta el debido proceso y atenta contra las garantías constitucionales que establece nuestra legislación”.
“Me parece muy bien que la Comisión de Constitución haya rectificado esto porque claramente lo que tenemos que hacer es aceptar que nuestra legislación ya contempla esto y que no es necesario modificarla en ese sentido, pero si tenemos que modificar algunos temas como las razones de la violencia que hay en el ámbito escolar”, aseguró Cristina Girardi.
La legisladora indicó que “nosotros estamos discutiendo un proyecto de ley en la Comisión de Educación que legisla sobre este tema, y lo que hemos visto con los especialistas que llevan años investigando sobre la violencia escolar, es que es el propio sistema y la sociedad la que genera violencia. Tenemos que ver cómo educamos en la no violencia, cómo aprendemos como ciudadanos a resolver los conflictos sin violencia. Uno sale a la calle en Chile y lo único que encuentra es un nivel de agresividad e incapacidad de resolver los problemas de manera pacífica que es impresionante, y eso se ve reflejado en nuestro sistema escolar donde existe una lógica competitiva donde sobrevive el más apto o el más fuerte”.
Santiago de Chile, 10 de octubre 2018
Crónica Digital