Ese bombardeo de objetos celestes derritió la corteza rica en hierro y formó los pedruscos tal y como se encuentran en la actualidad, consideraron los autores procedentes de Australia y China.
Al decir del líder de la investigación, Tim Johnson, nuestro modelo muestra que las rocas del río Acasta fueron el resultado de la disolución de la basáltica rica en hierro, que formó las capas superiores de la corteza del planeta primitivo.
Creemos que estas piedras pueden ser los únicos restos supervivientes de un aluvión de impactos extraterrestres que caracterizaron los primeros 600 millones de años de la historia de la Tierra, añadió Johnson, de la universidad australiana Curtin, en Perth.
Canberra, 17 agosto 2018
Crónica Digital /PL