Antonia Fortt, ingeniera ambiental de Oceana, indicó que “este Plan de Acción era una medida largamente anhelada por la organización”, la que desde 2005 viene denunciando el delicado estado de las poblaciones de tiburones en Chile y de los condrictios en general (clase de peces cartilaginosos a los que pertenecen los tiburones), los que son capturados sin ningún tipo de regulación.
El investigador y profesor de la Universidad Austral, Julio Lamilla, también celebró la medida, y recordó que un trabajo conjunto de Oceana y esa institución académica fue la primera en abordar este tema en el país.
Con este plan, Chile se suma a países como Ecuador y Brasil, que han respondido al llamado hecho por las Naciones Unidas en 1999, que planteó la necesidad de contar con un plan de manejo de tiburones que detuviese y revirtiera la alarmante disminución de estos animales en los mares del mundo,
Los tiburones son víctimas principalmente de la pesca incidental y el aleteo, una cruel actividad en la que el tiburón es sacado del agua, golpeado hasta aturdirlo, mutilado (se le cortan las aletas que luego se exportan a Asia), y devuelto al mar donde muere ahogado y desangrado. Aunque el aleteo ha sido prohibido en muchos países, en Chile se sigue practicando a bordo de algunos barcos pesqueros.
En lo concreto, la implementación del Plan de Acción Nacional significa tomar medidas especiales y permanentes de protección basadas en zonas de exclusión temporal de pesca, períodos de veda y otras, de acuerdo a las particularidades de las pesquerías que estén siendo reguladas.
También abre la posibilidad de declarar zonas libre de pesca en caso de comprobarse su importancia en el ciclo de vida y reproductivo de especies de tiburones. Por supuesto esto va acompañado de una mayor y mejor investigación de las especies presentes en aguas chilenas. Asimismo, se abogará por una mejor utilización del pez capturado, evitando que se desperdicie alrededor del 98% del animal, tal como ocurre hoy cuando se lleva a cabo aleteo.
Por todo lo anterior, Oceana reiteró su apoyo a este plan y pidió al Gobierno que inicie cuanto antes su implementación, debido a que el delicado estado de los tiburones y su lenta recuperación, obliga a actuar con rapidez. En ese sentido, Fortt explicó que los tiburones y demás condrictios son peces longevos, tienen una madurez sexual tardía y una tasa de reproducción baja, por lo que su capacidad de recuperarse tras una pesca intensiva es bajísima.
La profesional agregó que aunque en general existe un alto grado de desconocimiento en torno al estado exacto de las poblaciones de condrictios alrededor del mundo, sí se sabe que su biomasa ha disminuido drásticamente en los últimos años, por lo que muchos países han tomado importantes medidas al respecto.
Santiago de Chile, 4 de diciembre 2007
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