Con una positiva recepción de la crítica, los medios y el público Netflix estrenó globalmente la serie “El Eternauta”, una esperada adaptación de la icónica historieta del guionista de origen argentino Héctor Germán Oesterheld. La serie cuenta con un elenco de primer nivel encabezado por el actor Ricardo Darín como Juan Salvo, protagonista central del relato.
La primera temporada consta de seis episodios de una hora de duración y ya se confirmó un segundo ciclo. La serie es una producción de Netflix junto a K&S Films y fue creada y dirigida por Bruno Stagnaro, conocido por su trabajo en la aclamada serie “Okupas”. La filmación se llevó a cabo en Buenos Aires a lo largo de meses, usando locaciones reales, e introduciendo escenarios generados con tecnología avanzada de producción virtual.
En apenas un día, desde el 30 de abril, se transformó en la serie más visto a nivel global.
Oesterheld es una figura clave de la historieta en Argentina y el mundo. Escribió numerosos relatos de ciencia ficción y novelas, publicando en revistas como “Misterix”, “Hora Cero” y “Frontera”. Entre sus series más conocidas se encuentran Sargento Kirk, Bull Rockett y, por cierto, “El Eternauta”, considerada su obra maestra, en la que trabajó con Solano López a cargo de los dibujos. También creó biografías en formato cómic de figuras históricas como Ernesto Che Guevara y Evita Duarte de Perón.
“El Eternauta” explora temas como la solidaridad, el heroísmo colectivo ante la adversidad, la pérdida, el espíritu de lucha por la libertad y la resistencia contra la opresión.
De hecho, aquello se vincula con la propia historia de Oesterheld, detenido y desaparecido desde 1977, junto con sus cuatro hijas.
LOS SECUESTROS
“Mi nombre es Elsa Sánchez y soy la esposa de Héctor Germán Oesterheld, famoso en el mundo por haber escrito El Eternauta. En la época trágica de este país desaparecieron a mis cuatro hijas, mi marido, mis dos yernos, otro yerno que no conocí, y dos nietitos que aún estaban en la panza. Diez personas desaparecidas en mi familia”. Esas son las palabras de la compañera del genial guionista de historietas en el libro biográfico “Los Oesterheld”, obra de Fernanda Nicolini y Alicia Beltrami.
Elsa participó durante décadas en las Abuelas de Plaza de Mayo, hasta su fallecimiento en junio de 2015.
En una autobiografía ficticia, el guionista escribió: “Preguntado hacia 1970 d.C. sobre cuál era su obra maestra, Oesterheld respondió: no tengo una sino cuatro obras maestras: ‘Estela’, ‘Diana’, ‘Beatriz’, ‘Marina’, mis hijas”. Todas ellas fueron secuestradas en la última dictadura argentina, al igual que Héctor Germán y permanecen desaparecidos.
La obra más temprana de Oesterheld, en los 50 y principios de los 60, ya contenía sutiles críticas al capitalismo y el imperialismo. A medida que transcurrió el tiempo su compromiso social aumentó, lo que se expresó en una nueva versión más explícitamente política de “El Eternauta” en 1969, con dibujos de Alberto Breccia. Ello se acentuó luego con “El Eternauta II”, ilustrada también por Solano López, la cual debió finalizar en la clandestinidad a raíz de la persecución de la dictadura.
Como se ha señalado, la dictadura secuestró a sus hijas. Beatriz (19 años) fue detenida en junio de 1976 junto con su pareja; Diana, embarazada, fue raptada en agosto de 1976 en Tucumán, donde asesinaron a su compañero; ya tenían un hijo de un año llamado Fernando. Estela (25), la mayor, fue capturada el 1 de julio de 1977; intentó huir, fue baleada y llevada a un hospital, sin que se volviera a saber de ella; su pareja también fue asesinada. Marina (18), con ocho meses de embarazo, cayó en noviembre de 1977 con su esposo. Las jóvenes habían participado en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES) y en la Juventud Peronista (JP), al igual que los adolescentes de La Plata que desaparecieron en “La Noche de los Lápices”.
Es inevitable rememorarlo cuando en la serie de Netflix, el protagonista exclama: “Mi hija está en algún lado. Y no voy a parar hasta encontrarla”. La hija de Juan Salvo es interpretada por Mora Fisz, que representa una adolescente sensible y valiente, capaz de enfrentar la tragedia. Es el motor de su padre en la trama: encontrarla es uno de sus principales objetivos a lo largo de la historia.
El 27 de abril de 1977, el propio creador de “El Eternauta” fue secuestrado en La Plata. Pasó por centros clandestinos de detención como los denominados “El Vesubio” y “El Sheraton” (también conocido como Embudo) y Campo de Mayo.
En su testimonio ante la Comisión Nacional de Desaparición de Personas que produjo el Informe “Nunca Más”, el psicólogo sobreviviente Eduardo Arias contó: “Su estado era terrible (…) Uno de los recuerdos más inolvidables que conservo de Héctor se refiere a la Nochebuena de 1977. Los guardianes nos dieron permiso para sacarnos las capuchas y para fumar un cigarrillo. Y nos permitieron hablar entre nosotros cinco minutos. Entonces Héctor dijo que por ser el más viejo de todos los presos, quería saludar uno por uno a todos los presos que estábamos allí. Nunca olvidaré aquel último apretón de manos”. Oesterheld tenía entonces 60 años.
EL LEGADO
El 4 de septiembre en el país vecino se festeja el Día de la Historieta Argentina, ya que ese día del año 1957 apareció el número 1 de “Hora Cero Semanal”, la revista de Héctor Germán Oesterheld en cuyas páginas debutaron grandes personajes como “El Eternauta”. Su legado es evidente, en primer lugar por ser uno de los artistas de trayectoria más notable de la historieta argentina e hispanoamericana. Pero no solo es valorado por su enorme talento artístico, sino por su visión profundamente humanista de la vida y la sociedad.
Esa concepción del mundo se aprecia en los pliegues de “El Eternauta” y podrá ser apreciada en la serie de Netflix, cuya producción ha hecho el esfuerzo de mantener la esencia de la obra original al tiempo que adaptarla a una audiencia contemporánea. Al igual que en la historieta, la serie tiene relevancia política y social, pues aborda la resistencia colectiva y la importancia de la unidad y la solidaridad, lo que resuena aún más en el contexto actual de Argentina, con un Gobierno de extrema derecha y negacionista.
Ello también es aplicable a todos los países, incluido Chile, en que los extremistas de derecha se han pretendido levantar como alternativa de gobierno y poder.
La serie de “El Eternauta en Netflix” es una adaptación ambiciosa de una obra fundamental del cómic. Tiene un elenco destacado y una producción cuidada, con la pretensión de llevar lo esencial de la historia atemporal a una nueva generación de espectadores, manteniendo su espíritu de unidad, resistencia y solidaridad.
El relato de El Eternauta comienza en una noche de verano en Buenos Aires, durante una partida de cartas (truco) entre Juan Salvo y un grupo de amigos. De ponto, ocurre un apagón y una extraña nevada comienza a caer, pero esta no es común: el contacto con sus copos resulta mortal de forma instantánea. Atrapados en la casa de Juan, los sobrevivientes se dan cuenta de que es el inicio de una invasión extraterrestre. La nevada es solo la primera etapa de un plan para diezmar a la población humana. Juan y sus amigos, con otros sobrevivientes que encuentran en su camino, se organizan para resistir.
Todo indica que los invasores y sus métodos de aniquilamiento son referencias a los Golpes de Estado de la historia argentina. De hecho, las tres versiones que fueron escritas por Oesterheld coincidieron, respectivamente, con los regímenes de Pedro Eugenio Aramburu, Juan Carlos Onganía y el llamado Proceso de Reorganización Nacional. Coincidencia: ahora el relato llevado al universo audiovisual se estrena con Javier Milei ocupando la Casa Rosada. Sus fanatizados partidarios ya destilan odio a destajo contra la serie de Netflix en las redes sociales.
Así, el mensaje del relato adquiere un nuevo sentido: “Nadie se salva solo. Juntos somos fuertes”. Es la idea de la épica de un «héroe colectivo».
En una de sus historietas, el corresponsal de guerra Ernie Pike, creado por Oesterheld para narrar las trágicas historias de soldados en la Segunda Guerra Mundial, le dice a su fotógrafo: “Tiene que haber un lugar donde estas tragedias hechas de coraje y desencuentros se anoten a favor de la especie humana”.
Por Víctor Osorio. El autor es periodista y ex Ministro de Estado.
Santiago, 2 de mayo de 2025.
Crónica Digital.
