
En la sede de la Cepal en Chile comenzó hoy la segunda conferencia intergubernamental destinada a analizar la marcha de la implementación del Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular en nuestra región.
La cita fue abierta por José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), así como Amy Pope, directora de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y María Teresa Urueña, de la Red Jesuita de Colombia.
Durante sus intervenciones, los oradores coincidieron en señalar que la movilidad ha acompañado a la humanidad desde sus primeros momentos, sin embargo en días recientes adoptó características particulares.
Salazar-Xirinachs señaló que esta segunda revisión del Pacto Mundial para la Migración tiene lugar en un momento en el cual este fenómeno adquiere un rol central en la realidad y el debate político.
Prácticamente todos los países de la región son parte de los ciclos migratorios, ya sea como origen, destino, tránsito o retorno y, ciertamente, señaló, esa mirada se ha complicado en las últimas semanas.
Recordó el máximo representante de la Cepal que la principal característica de estas personas es su condición de vulnerabilidad y sufren discriminación, racismo y xenofobia, tanto durante su traslado y estadía, como en su repatriación.
Desde la ONU rechazamos discursos de odio y violencia y promovemos la divulgación de los aportes valiosos hechos por los migrantes al desarrollo sostenible de los países y a la diversidad cultural, aseguró.
La presidenta de la OIM, Amy Pope, recordó que estamos ante un fenómeno donde hay personas viajando hacia el sur desde los Estados Unidos a través de México, y muchas están quedando varadas lo cual debe abordarse de una manera constructiva.
Una alternativa, explicó, es que tanto los migrantes como las entidades no asuman el retorno como un fracaso, sino una oportunidad de bridar alternativas para su incorporación a proyectos de desarrollo local por medio de una asociación positiva entre el sector público y privado.
Más crítica fue María Teresa Urueña, quien habló en nombre de las Partes Interesadas y afirmó que no esperaban ver tan pronto el ataque frontal contra las personas migrantes.
“No sospechábamos que los hoteles se convertirían en nuevos centros de detención, o que tener un tatuaje sería la prueba reina en un juicio sumario para ser recluidos en lugares de máxima seguridad”, indicó.
Urueña, representante de la Red Jesuita de Colombia, denunció que el multilateralismo también es atacado y en menos de dos meses varias líneas rojas fueron traspasadas ante el mutismo de la comunidad internacional.
La conferencia intergubernamental estuvo precedida la víspera por una reunión de consulta de las Partes Interesadas y finalizará mañana jueves en la capital de Chile.
Santiago de Chile, 19 de marzo 2025
Crónica Digital/PL