En caso que la DC compitiera de manera independiente, no obtendría escaños, mientras que una estrategia unificada del oficialismo podría arrojar mejores resultados que una lista única.
En un escenario político marcado por la volatilidad y la redefinición de alianzas, las proyecciones para las elecciones parlamentarias de 2025 muestran un panorama incierto en cuanto a la conformación de la Cámara de Diputados y Diputadas. El análisis, realizado por la consultora Factoría Pública, se basa en los resultados de las últimas elecciones de concejales y aplica diferentes métodos de distribución de listas, revelando cómo podría fluctuar el número de escaños para los principales sectores políticos.
Según el estudio, se evaluaron tres escenarios: de convergencia, dispersión y distribución orgánica, cada uno con implicancias significativas para el oficialismo, la oposición y los partidos emergentes. En el escenario de convergencia, donde los bloques oficialistas y opositores se presentan claramente definidos, el oficialismo junto a la Democracia Cristiana (DC) obtendría la mayor cantidad de escaños, aunque sin alcanzar la mayoría en la Cámara. Sin embargo, el pacto entre Chile Vamos y Republicanos podría otorgarles una mayoría significativa, destacándose la importancia de los votos republicanos para consolidar un bloque opositor fuerte.
En un contexto de dispersión, con una mayor cantidad de listas por sector político, los escaños se distribuyen de forma más atomizada. A pesar de que el oficialismo podría aumentar ligeramente su representación, la derecha, liderada por Chile Vamos y los Republicanos, mantendría una ventaja sustancial, demostrando que la unidad del sector es clave para asegurar una mayoría congresal.
El tercer escenario, de distribución orgánica, plantea que a mayor dispersión de un sector, el contrario se beneficia. En este caso, si la DC compitiera de manera independiente, no obtendría escaños, mientras que una estrategia unificada del oficialismo podría arrojar mejores resultados que una lista única. Chile Vamos, en cambio, lograría un aumento considerable de su votación si la oposición se fragmenta.
Las proyecciones no consideran al Partido Nacional Libertario (PNL) en base a las elecciones de concejales previas, ya que esta colectividad no participó en dicha instancia. No obstante, el análisis sugiere que cualquier alianza con el PNL podría reforzar aún más la presencia de la ultraderecha en el Congreso, aumentando la dependencia de Chile Vamos en estos votos.
El estudio de Factoría Pública evidencia que las alianzas políticas y la estrategia de distribución de listas jugarán un rol determinante en las elecciones parlamentarias de 2025. Tanto el oficialismo como la oposición deberán evaluar cuidadosamente sus pactos y estrategias para maximizar su representación y, potencialmente, asegurar la mayoría en la Cámara Baja.
Santiago de Chile, 6 de marzo 2025
Crónica Digital