La decisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos de mantener en el mercado sin restricciones una popular píldora abortiva podría considerarse una victoria para los defensores de los derechos reproductivos a nivel nacional.
En medio de divisiones sobre el tema entre los partidos Demócrata y Republicano, el máximo tribunal hizo su primer pronunciamiento luego del retroceso que dio con la derogación el 24 de junio de 2022 de un histórico fallo, el Roe v. Wade que brindaba protección federal al aborto.
La Corte desestimó en la víspera una demanda y dictaminó que la mifepristona continuará disponible en el mercado para las mujeres que la requieran, rechazando el reclamo de un grupo antiaborto.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó el uso de esta pastilla en el año 2000 y el organismo regulatorio dijo que, después de su utilización por millones de mujeres, la mifepristona demostró ser “extremadamente segura”.
Sin embargo, este jueves los republicanos del Senado bloquearon un proyecto de ley que era liderado por los demócratas que garantizaría amplias protecciones federales para la Fertilización In Vitro (FIV) a nivel nacional.
La votación fue 48-47, con sólo dos republicanos votando a favor: Lisa Murkowski de Alaska y Susan Collins de Maine, puesto que para la mayoría de los miembros de esa bancada la propuesta legislativa iba demasiado lejos.
La Ley de Derecho a la FIV fue sometida a votación por el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (Nueva York), saca a flote la posición del Partido Republicano respecto a los derechos reproductivos, un tema que está de lleno en la campaña del ciclo electoral 2024.
Los demócratas advirtieron que el veredicto del Supremo en 2022 significa que también el acceso a la anticoncepción y la FIV están en riesgo.
Presentado por los senadores demócratas Patty Murray (Washington), Tammy Duckworth (Illinois), y Cory Booker (Nueva Jersey), el proyecto establecería un derecho federal para que las personas accedan a servicios de tecnología reproductiva asistida por FIV, para que los proveedores ofrezcan el procedimiento y que las aseguradoras lo cubran.
Los conservadores creen que los embriones descartados como parte del proceso de FIV, lo que es común, serían tratados como asesinato u homicidio involuntario.
Incluso el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, firmó una propuesta legislativa que otorgaría a un óvulo fertilizado los derechos de una persona.
En los últimos dos años varios Estados que son controlados por republicanos promulgaron medidas para prohibir o restringir el derecho al aborto.
Los derechos reproductivos escalaron a una de las mayores prioridades de los votantes estadounidenses en la actual etapa electoral. Uno de cada ocho electores asegura que este tema “es el más importante” al emitir su criterio en las urnas en 2024, arrojó una reciente encuesta de la organización KFF.
Washington, 14 de junio de 2024.
Crónica Digital / Prensa Latina.
