Una semana de trabajo con autoridades y representantes de la comunidad de la isla de Rapa Nui (Chile) tuvo Claudia Uribe, directora de la Oficina de la UNESCO en Chile, quien junto con Nicolás Rojas, especialista en patrimonio, visitaron el sitio de Patrimonio Mundial en la isla para explorar los daños sufridos en los moai y otros elementos arqueológicos y naturales que conforman esta área protegida por la UNESCO.
La misión tuvo lugar entre el 17 y el 21 de octubre de 2022 con un carácter exploratorio para “evaluar las posibilidades de activar fondos de emergencia desde la UNESCO que ayuden a diagnosticar la magnitud de los daños a este sitio del Patrimonio Mundial y a fortalecer el plan de gestión y de protección integral del mismo”, señaló Claudia Uribe, directora de la representación de la UNESCO en Chile. Uribe agregó que “La idea es centrar esta ayuda en las tareas de diagnóstico que permitan evaluar la extensión del daño ocasionado por el incendio y con ello determinar las acciones necesarias para recuperar el parque y su protección futura”.
El incendio en la isla, que se encuentra en el Pacífico sur a 3.700 kilómetros de la costa de Chile, fue declarado el 4 de octubre, se extendió por un área aproximada de 240 hectáreas, y afectó el cráter, la cantera y las inmediaciones del volcán Rano Raraku. El fuego dañó áreas naturales y deterioró estructuras arqueológicas, entre ellas 177 moai (según un primer informe emanado por la Corporación Nacional Forestal de Chile, CONAF), testigos de piedra de una sociedad de origen polinesio que desde el siglo X a XVI construyó santuarios y estatuas que conforman un legado cultural inigualable y que fascina al mundo entero.
Santiago de Chile, 26 de octubre 2022
Crónica Digital/PL