El fuego, cuyo origen aún se investiga, se declaró el viernes por la tarde y de acuerdo con el servicio de bomberos de California, resulta difícil mantenerlo bajo control.
Una parte de la población del condado de Mariposa fue evacuada y se registran daños en unas 10 estructuras residenciales y comerciales, reportó el diario Mercury News.
También se han ordenado numerosos cierres de caminos, incluido uno en la autopista 140 entre Carstens Road y Allred Road, bloqueando una de las rutas principales hacia el Parque Nacional de Yosemite.
Según el Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Cal Fire como se le conoce en inglés), la zona afectada se extiende en más de 26 kilómetros cuadrados.
Cal Fire indicó que el comportamiento explosivo del fuego es un desafío para los bomberos, en tanto se registran avances frecuentes de las llamas, incendios puntuales y fuegos grupales.
En medio del tiempo extremadamente cálido y una sequía extrema, el llamado incendio Oak se se ha propagado en numerosas direcciones.
Hace solo una semana, un incendio había amenazado con destruir el bosque de secuoyas gigantes del Parque Nacional de Yosemite, pero este pudo ser finalmente controlado por los bomberos.
Todo ello se produce en medio de una ola de calor que afecta varias regiones de la nación norteña.