Por 114 votos a favor, 0 en contra y 0 abstenciones, este miércoles en segundo trámite constitucional, la Cámara de Diputados y Diputadas aprobó con modificaciones el proyecto que prohíbe discriminación laboral frente a análisis genéticos.
Valparaíso, 19 de enero de 2022. “Esta Ley prohibirá que se condicione la con tratación, permanencia, promoción o movilidad en el empleo a la ausencia o existencia de genes que evidencien la probabilidad de desarrollar enfermedades o anomalías”, explicó el senador Alejandro Navarro, autor de la moción ingresada el 2011 y que hoy pasó a tercer trámite.
De acuerdo al Presidente de la Comisión de DDHH del Senado, “vivimos en un mundo en que ya nada es privado; gran parte de la gente comparte permanentemente su ubicación a Google Maps, sus fotos familiares a Instagram y sus opiniones a Twitter. Las campañas electorales se han ganado por quienes han manejado con más destreza la Big Data, y los parámetros de salud se han digitalizado casi por completo”.
“En esta sociedad de la información”, continuó, “es muy recurrente que los usuarios de internet busquen sus síntomas físicos en Internet, lo que podría ser información clave para un futuro empleador, si es que esos datos no se encuentran protegidos, ocurriendo algo similar con la intimidad genética de los trabajadores”.
“Si bien en Chile se protegen los derechos genéticos, ya que el Artículo 127 del Código Sanitario establece que los exámenes de laboratorios clínicos son reservados, esto solo ocurre mientras exista una relación laboral ya constituida, quedando desprotegidas las personas que están postulando a un trabajo, las que podrían verse afectadas frente a una discriminación luego de un análisis genético”, advirtió el parlamentario.
Según Navarro, “el Convenio del Consejo de Europa para la Protección de los DDHH y la Dignidad del Ser Humano, plantea que “solo podrán hacerse pruebas predictivas de enfermedades genéticas (…) con fines médicos o de investigación médica” (artículo 12), mientras que la Unesco ha establecido que la dignidad humana impone que “no se reduzca a los individuos a sus características genéticas”. Suiza por su parte prohibió que se discriminara a las personas por sus características genéticas y se han regulado los exámenes genéticos en el campo del trabajo, mientras que en Austria se prohibió a los empleadores exigir resultados de análisis genéticos para personas en busca de trabajo”.
“Es decir”, prosiguió, “ya ha sido regulado en otras latitudes, por lo que se hace urgente aplicarlo en Chile; así como avanzamos con la consagración constitucional de los “neuroderechos”, debemos hacerlo también con los derechos genéticos de los trabajadores antes de que se vulneren derechos laborales fundamentales”.
“Debemos adelantarnos entonces a la dura discriminación que pueden traer consigo los análisis genéticos. Por ello, esperamos que el tercer trámite sea muy expedito y la Ley que regula la intimidad del trabajador y establece la prohibición de discriminación laboral frente a los análisis genéticos, sea realidad muy prontamente”, finalizó Navarro.