Cerca de 500 asignaturas se impartirán de manera presencial durante el segundo semestre.
Este miércoles fue un día especial para los estudiantes de la Universidad de Valparaíso: las facultades abrieron sus aulas y laboratorios para retornar a la presencialidad, tras casi un año y medio de clases remotas.
La UV inició la modalidad presencial con actividades prácticas en los laboratorios de especialidades y también en campos clínicos, dejando las sesiones en línea para clases teóricas y en modo híbrido.
Cerca de 500 asignaturas se impartirán de manera presencial durante el segundo semestre en la Universidad de Valparaíso, gracias a la apertura de más 157 salas y treinta laboratorios implementados para desarrollar simultáneamente docencia presencial y remota a los estudiantes.
Así lo informaron las autoridades de la Universidad, encabezadas por el rector Osvaldo Corrales, quien junto al vicerrector académico, Carlos Becerra, y la decana Marcela Alviña realizaron una visita a la Facultad de Farmacia, donde cerca de sesenta alumnos de la carrera de Química y Farmacia asistieron, durante esta primera jornada, en forma parcializada y de acuerdo a los aforos permitidos, a una nivelación de prácticas experimentales de laboratorio del campo de la química y la biología, para estudiantes de la generación que ingresó el año 2020.
Este grupo de estudiantes, junto a la cohorte de ingreso 2021, no había podido tener, hasta ahora, clases presenciales, dado que la pandemia de Covid-19 obligó a un confinamiento obligatorio e impidió a los estudiantes asistir a la universidad.
En ese contexto el rector Osvaldo Corrales señaló que “nuestro primer mensaje a toda nuestra comunidad universitaria es que hemos adoptado todas las medidas sanitarias de rigor para garantizar que el retorno a la presencialidad sea seguro”.
Además, el rector indicó que para que el retorno continúe siendo muy seguro es imprescindible que todos y todas se comprometan con la mantención de las medidas sanitarias: uso de la mascarilla, atención del distanciamiento físico y también lavado frecuente de manos y uso de alcohol gel cuando asistan a los recintos universitarios.
“Por ello también, y con el propósito de evitar las aglomeraciones, hemos dispuesto que las actividades sean espaciadas y ha sido necesario generar todas las secciones que hagan falta para que las y los estudiantes puedan asistir en grupos que no superen los límites establecidos para evitar situaciones de riesgo”.
El vicerrector académico afirmó que “durante el segundo semestre se van a realizar más de 500 clases de asignaturas, en la modalidad híbrida o presencial, en toda la institución. La idea es ir trabajando y ajustando eso durante agosto, de manera que en septiembre ya tengamos el plan en pleno funcionamiento”.
El académico agregó que “hemos planificado la docencia hibrida con más de 157 salas y más de treinta laboratorios implementados y con eso estamos desarrollando en cada una de las carreras docencia hibrida, que incluye actividades presenciales, como ven aquí ustedes en laboratorios y campos clínicos”.
La profesora Marcela Escobar, jefa de carrera de Química y Farmacia, indicó que el retorno a la presencialidad es una excelente noticia tanto para académicos como para estudiantes, ya que es un regreso a hacer vida universitaria, a vivir nuevamente en comunidad y lograr los resultados de aprendizaje que requieren los estudiantes para desarrollarse efectivamente en su campo profesional. “Es esencial esta actividad presencial, es esencial no solamente en el ámbito disciplinario. Sin duda también lo es desde el ámbito social, el ámbito personal, un poco liberarse del estrés, liberarse del encierro y volver a retomar a las actividades normales de la vida universitaria”, aseguró la académica.
Finalmente, los estudiantes valoraron la vuelta a clases presenciales, experiencia que no habían experimentado desde su ingreso a la Universidad. Es el caso de la joven Carla Mendoza, estudiante de la carrera de Química y Farmacia, quien ingresó a la carrera el año 2020. “Es como el primer día de clases. Volver es importante, emocionante y entretenido, porque no conocía a mis compañeros, la única comunicación que teníamos siempre había sido online. Verlos ahora es más entretenido y baja un poco la presión de las clases. Aparte, uno se siente más en ambiente de estudio, de universidad. Es un cambio que, aunque uno no lo crea, es súper grande, que se espera y también se necesita”, afirmó la joven.
Las autoridades señalaron que en toda la Universidad están disponibles los elementos de protección personal para quienes lo requieran. También llamaron a mantener las medidas de autocuidado y respetar los controles de ingreso habilitados con toma de temperatura, dispensador de alcohol gel y registro de los asistentes para mantener la trazabilidad.