El senador Alejandro Guillier tomó la decisión de incorporarse al Partido Progresista de Chile, según informa hoy el diario “El Mercurio”, en una nota titulada “El nuevo refuerzo del PRO”, que explica que el congresista hasta ahora independiente y candidato presidencial en el 2017 se ha integrado a la colectividad fundada por Marco Enríquez–Ominami.
Con esta nueva incorporación, el Partido Progresista tendrá en sus filas a tres ex candidatos a la Presidencia de la República (Guillier, Enríquez–Ominami y Alejandro Navarro) y dos senadores.
Conforme a la nota, desde 2019 fueron construyéndose crecientes coincidencias. “Sin estar coordinados, en noviembre de ese año, tanto Alejandro como yo fuimos muy duros” con el llamado “Acuerdo por la Paz y la nueva Constitución”, explicó Enríquez–Ominami.
Agrega el reporte que “la verdadera clave de esta nueva sociedad estuvo en Antofagasta”, en específico “en la candidatura a gobernador por esa zona del militante del PRO, Ricardo Díaz, a quien ambos (Guillier y Enríquez–Ominami) apoyaban”. Explica que “una vez que Díaz ganó, con un 72% de los votos, las dudas se disiparon y el proceso de acercamiento se cerró”.
El senador explicó: “La experiencia en estas cuatro elecciones es que el PRO abrió sus puertas a los independientes. A la ciudadanía. Gracias a ellos mucha gente valiosa logró ser electa. Eso aún no lo veo en otros partidos. Ser independiente no es lo mismo que no tener referencia política y el PRO es uno de los pocos partidos que ha visto esto, que se ha enriquecido con el aporte de toda esta gente”.
La información detalla que “el Partido Progresista aún tiene pendiente una definición presidencial. Algo que no cambiará, por el momento, según cuentan ambos excandidatos”.
“Lo que hemos conversado con Alejandro es unidad, unidad, unidad. Eso requiere sustancia, densidad y no frivolidad. Hemos tenido algunas candidaturas que participan de una lógica más de marketing (…) Por eso, haremos las cosas que correspondan para la unidad. Nuestro partido estará puntual el 23 de agosto, dispuesto a tomar cualquier desafío en que se nos necesite, como comandantes o como soldados”, señaló Enríquez–Ominami.
Por su parte, Guillier agregó que “se puede competir, pero no hay que perder el objetivo. Tenemos que construir un objetivo común. No podemos, como en 2017, ir con un progresismo quebrado. Yo tengo eso en mi conciencia. No fui capaz de unir al progresismo en torno a una propuesta de cambio. Por hoy existen mucho mejores condiciones, porque la ciudadanía se involucró”.
Santiago, 27 de junio 2021.
Crónica Digital.