El miércoles pasado el presidente Sebastián Piñera anunció esas medidas, pero en sectores políticos y académicos, aunque las consideraron superiores a otras anteriores, fueron criticadas por ser inferiores a lo pedido largamente desde la oposición y ser apenas un alivio transitorio para las Pymes.
La presidenta del Senado, Yasna Provoste, una de los firmantes de la declaración y que asumió una posición muy crítica hacia el Ejecutivo, advirtió incluso que el IFE anunciado no tiene en cuenta el aumento de los gastos de las familias por el incremento de precios en medio de la pandemia.
Asimismo, advirtió que el gobierno prevé entregar ese ingreso solo durante tres meses, cuando debería ser al menos hasta fines del presente año.
El texto de los parlamentarios señala que buscarán dialogar con las gremios para acordar las mejoras que son necesarias a los proyectos del Gobierno para que el respaldo a los pequeños y medianos empresarios sean los adecuados.
Además, anuncia que las sesiones de las comisiones del Senado que analizarán esos temas ‘se transmitirán públicamente y con la participación de los actores sociales (…), para que el país conozca con toda claridad las posturas del Gobierno y de la oposición’.
La declaración subraya que los proyectos del Gobierno no son suficientes para resolver los problemas que enfrentan las familias chilenas y las pymes por la crisis, no mejoran la estrategia sanitaria ni las vías para financiar las medidas anunciadas.
Añade que ‘un apoyo real y efectivo a las Pymes es indispensable también, en el marco de una estrategia de reactivación económica, partiendo de la recuperación del empleo’.
Asimismo, llama al Gobierno ‘a concurrir al Congreso para corregir y mejorar los elementos indispensables de los proyectos para hacerlos sostenibles y no continuar confundiendo a la opinión pública con falsos debates alejados de las necesidades de las familias’.
Santiago de Chile, 31 de mayo 2021
Crónica Digital/PL