Ángela González Aros tenía 24 años, era madre soltera de un hijo de ocho años y vivía con sus padres en la popular Villa El Estero de la comuna de Colina. Para sobrevivir, trabajaba incansable en la venta de cosméticos, artículos de maquillaje y otros productos en la feria, en eventos de pequeños emprendedores y por las redes sociales. Era muy conocida en la comunidad. Y era parte de los centenares de miles de jóvenes que desde el viernes 18 de octubre de 2019 salieron a las calles, hastiados de los abusos y de la desigualdad. Al calor de las movilizaciones, fue comprometiéndose con el sueño de construir una nueva forma de producir la convivencia social en Chile.
Le arrebataron la vida la noche del lunes 29 de marzo, cuando se conmemora el “Día del Joven Combatiente”. Fue atropellada mientras participaba en una manifestación en Avenida General San Martín con calle Lo Seco. El chofer de una camioneta negra Mercedes Benz se abalanzó en contra de los jóvenes. De acuerdo a los testigos y los videos de las cámaras de televigilancia, el conductor detuvo la camioneta, luego aceleró, hizo sonar el vehículo, y se lanzó a los manifestantes. Habría arrastrado a Ángela por unos 10 metros. Después se dio a la fuga, sin prestar auxilio a la víctima.
Fue trasladada hasta el Servicio de Alta Resolución (SAR) de Colina. Pasadas la 01:40 horas de la madrugada del martes partió de este mundo por un shock hipovolémico.
La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo al presunto responsable. Fue identificado por la prensa como Juan Zamorano Álvarez.
La causa penal está caratulada por el delito de homicidio simple. El Fiscal (s) Claudio Aguirre, de la Fiscalía Centro Norte, puntualizó que los hechos muestran que no fue que el conductor “se trasladaba por la carretera y se enfrentó a esta barricada de una manera sorpresiva y eventualmente la dinámica es de un accidente de tránsito. Eso se descartó en primera instancia”. Explicó que, en verdad, “el conductor del vehículo se enfrenta a esta barricada, se detiene y posteriormente avanza y atropella a la víctima, quien resulta politraumatizada y finalmente fallece”.
“Esa dinámica nos da cuenta de que hubo un dolo homicida y no un accidente de tránsito”, afirmó.
El Juzgado de Garantía de Colina decretó el 31 de marzo la prisión preventiva del hombre y dispuso un plazo de investigación de cien días. Fue recluido en la cárcel de Colina II.
Claudio Lillo, que ahora es candidato a concejal, me contó –notoriamente afectado– que Ángela era conocida entre los muchísimos jóvenes que, desde el “estallido social”, en Colina comenzaron a organizarse política y/o socialmente. Ellos se encontraron al calor de las protestas, en las calles de Colina. Me dijo que la joven era parte de un colectivo feminista que se formó, autoconvocado, en el marco de la movilización. “Era alegre y muy entusiasta”, comenta.
Desde entonces fue una resuelta participante de las actividades sociales en la comuna, incluyendo las ollas comunes que emergieron en la pandemia. Por cierto, en innumerables ocasiones partió hacia la Plaza de la Dignidad. En sus redes sociales publicó una foto de una de esas manifestaciones y escribió: “Hermoso. Aguante los que luchamos por un país mejor”. La última vez que llegó al epicentro de la protesta ciudadana, fue el pasado 8 de Marzo, para la marcha con motivo del Día Internacional de la Mujer.
Colina, capital de la Provincia de Chacabuco en la Región Metropolitana, ha sido gobernada, casi sin contrapesos por los conservadores, desde que el año 2000 fue electo alcalde Mario Olavarría (UDI), acompañado por un Concejo Municipal en que seis de los ocho concejales pertenecen a RN, UDI y Evopoli (los otros dos integran la Democracia Cristiana).
Todo ello pareció comenzar a cambiar con la revuelta social, en que se registraron enormes manifestaciones en la localidad y hubo también una violenta represión policíaco–militar. En el plebiscito del 25 octubre de 2020, el Apruebo se impuso con un 66,17% de los votos, mientras que el Rechazo logró un 33,83 por ciento. Ángela fue uno de los votos que optó por una Nueva Constitución.
Colina es, además, la comuna en la que reside Gustavo Gatica Villarroel, el estudiante que quedó ciego a raíz de los disparos de la policía uniformada el 8 de noviembre de 2019 en las inmediaciones de la Plaza de la Dignidad. Gustavo llegó a la velatón con que se despidió a Ángela.
El Subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli (RN), dijo “lamentar que una persona haya resultado fallecida como consecuencia de haber estado en el contexto de una barricada y haber sido víctima de un atropello”. Por otro lado, en su balance sobre los incidentes el 29 de marzo, dijo: “Me pregunto, ¿para qué necesitamos observadores de DD.HH. en los hechos de violencia de ayer? Ayer no había ninguna manifestación pacífica, ninguna demanda legítima (…) Ahí no hay nada que observar”.
Galli es abogado de la Pontificia Universidad Católica de Chile, le correspondió representar a Chile como co–agente ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, y el 2017 fue director político–legislativo de la Fundación Avanza Chile, creada por Sebastián Piñera para reconquistar el gobierno por segunda vez. Sin duda, debería que saber que el derecho a la vida tiene que ser respetado a todo evento (Ángela no murió “a consecuencia” de estar en una barricada, sino a consecuencia de un homicidio) y los derechos humanos deben ser respetados también a todas las personas y en todas las circunstancias.
El día de los funerales de la joven, sus vecinos, amigos y familiares lloraron su muerte antes de tiempo. Asimismo, expresaron que era una persona maravillosa, una amiga excepcional, una excelente madre e hija, una joven con energía y con sueños. Y pedían justicia.
La joven era una gran admiradora de Mon Laferte. De hecho, hizo el esfuerzo de asistir al Festival de Viña del Mar para su recordada presentación en febrero del año pasado. Estaba orgullosa de una foto con la talentosa artista. Tras su muerte, la cantante escribió en sus redes sociales: “Mujer valiente y luchadora, mi corazón está contigo y tu familia. Te vamos a extrañar mucho. Te amo, en donde estés. Yo seguiré tus luchas, te lo prometo”.
Ángela vivirá para siempre en la memoria de los que luchan por un Chile Nuevo.
Imágenes: Redes Sociales.
Por Víctor Osorio. El autor es director ejecutivo de la Fundación Progresa.
Santiago, 1 de abril 2021.
Crónica Digital.