En medio de un aumento exponencial de nuevos casos de la Covid-19 a nivel nacional, al menos 132 personas fueron detenidas en esta capital por ignorar disposiciones sanitarias, informó hoy Carabineros de Chile.
Según el cuerpo policial, los detenidos fueron los anfitriones e invitados a una boda en la aristocrática comuna Las Condes y los participantes en una fiesta clandestina en la municipalidad de Ñuñoa, efectuadas la víspera.
En el matrimonio celebrado en el jardín de una residencia, contaban incluso con DJ y animador, y los participantes, tras ser sorprendidos por un dron de la policía, se ocultaron al interior de la casa, a donde llegó personal de Carabineros y detuvo a 53 personas.
Esa cifra superaba ampliamente el número de solo 20 participantes permitidos en reuniones sociales por las medidas de confinamiento en la capital.
El alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, criticó la indisciplina y calificó el hecho de “inaceptable” luego de personarse en el lugar al recibir denuncias de los vecinos sobre ruidos molestos, por el alto volumen de la música.
En la municipalidad de Ñuñoa, personal policial descubrió durante un recorrido de rutina a 79 personas participando de una fiesta clandestina, todos jóvenes, que fueron igualmente detenidos.
Estos hechos se suman a una seguidilla de sucesos similares denunciados en los últimos
días, en momentos en que el país sufre un aumento de nuevos casos de Covid-19 que en la jornada del viernes llegaron a cuatro mil 201, la cifra más alta desde el 28 de junio, cuando el país se encontraba en el peor momento de la pandemia.
El más sonado fue una fiesta celebrada en la región de Valparaíso en un exclusivo condominio de la playa de Cachagua, frecuentada por los estratos más acaudalados.
Las críticas se multiplicaron luego que los participantes, entre ellos hijos de políticos y de figuras de la élite chilena, subieran a redes sociales videos del festejo días después de la celebración, y conocerse que, en este caso, solo fueron requeridos por las autoridades policiales y el jolgorio continuó.
Ello obligó a la senadora Ximena Ossandón, de la Democracia Cristiana, a pedir disculpas públicamente por la participación de dos de sus hijos en la fiesta clandestina, aunque hasta ahora solo fue la única en dar la cara.
Cachagua salió a la palestra anteriormente cuando el propio presidente Sebastián Piñera fue visto paseando por la playa sin mascarilla y fotografiándose con otras personas sin el debido distanciamiento físico, lo que generó fuertes críticas al mandatario por no cumplir las medidas que él mismo reclama a sus compatriotas.
Santiago de Chile, 11 de enero 2021
Crónica Digital/PL