América Latina y el Caribe fue considerada hoy como un pilar para la seguridad alimentaria mundial por el director general de la Organización de las Naciones Unidades para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Qu Dongyu.
En su intervención durante la apertura de la 36 Conferencia Regional de la FAO, que organiza de forma virtual Nicaragua, el directivo afirmó que este territorio se convertirá en la mayor canasta de alimentos para el planeta en el futuro cercano.
Dongyu destacó los enormes recursos naturales de los que dispone la región para realzar su capacidad de producir alimentos, pero apuntó que para lograrlo primero se deben superar retos que solo será posible si “obramos todos juntos”.
Garantizamos que toda nuestra labor contribuye a la consecución de la agenda 2030, que es nuestro marco común en pos del desarrollo sostenible, sostuvo el funcionario en la cita en la que participan los 33 Estados miembros en el subcontinente.
Queremos crear una FAO ágil e inclusiva que esté al servicio de sus miembros con el objetivo de elaborar mejorías en la producción de alimentos, nutrición, entorno y vida, manifestó.
Entre los cambios estructurales que actualmente implementa el organismo mundial, destacó la creación de una oficina dedicada a los pequeños Estados insulares en desarrollo, así como a los países menos avanzados y sin litoral costero.
Es algo importante -recalcó- porque 18 de las 33 naciones de la región se enmarcan en una o más de estas categorías, que ahora están abarcadas en esta nueva oficina, cuyo director también proviene de su área geográfica, señaló.
El director general se refirió igualmente al impacto de la pandemia de la Covid-19 en todas las esferas de la vida, especialmente en la seguridad alimentaria y en los ingresos.
Indicó que en esta región se perdieron más de 35 millones de trabajos y que la ONU considera que hasta 28 millones de personas podrían caer en la pobreza extrema, lo cual los haría más propensos a sufrir una seguridad alimentaria grave.
En este sentido, apuntó que la FAO se erige como punta de lanza para hacer frente a los retos que plantea la crisis sanitaria y recientemente colocaron en marcha un programa integral de respuesta y recuperación, cuyo objetivo es prevenir una emergencia alimentaria mundial durante y después de la pandemia.
Bajo la presidencia de Nicaragua, la conferencia de la entidad multilateral se extenderá hasta el miércoles con la participación inédita de casi 450 delegados gubernamentales, así como otros tantos representantes de la sociedad civil, el sector privado, académico y científico.
Santiago de Chile, 19 de octubre 2020
Crónica Digital/PL