El Movimiento al Socialismo (MAS) culminó su campaña electoral con la promesa de su candidato presidencial, Luis Arce, de sacar a Bolivia de la crisis.
Arce habló en una masiva y jubilosa concentración en Senkata, barrio de la vecina ciudad de El Alto, donde se produjo una masacre en noviembre de 2019, cuando militares y policías abrieron fuego contra una concentración antigolpista y dieron muerte al menos a 15 civiles.
Rindió homenaje a los caídos en Senkata y en la localidad de Sacaba y El Porvenir, a los que llamó héroes de la democracia y dijo que la victoria en los comicios del domingo próximo será también el triunfo de los caídos.
Recordó que el MAS asumió el gobierno en 2006 y encontró, como hoy, un país quebrado, sin futuro, sin dinero y sin recursos, “y trabajamos día y noche, arriesgando nuestras vidas para sacar adelante al país”.
Recordó que ese Gobierno obtuvo los mejores indicadores económicos y sociales de la historia de Bolivia. “Hoy nuevamente el MAS enfrenta el mismo desafío: un país quebrado, sin recursos y sin democracia, como lo ha dejado el régimen de facto en solo 11 meses”, señaló Arce.
“Y vamos a sacar adelante nuevamente al país, vamos a darle al pueblo lo que necesita: estabilidad económica, política y social”, añadió.
Señaló que su candidatura es la única garantía de que el Estado mantendrá los subsidios sociales creados por el MAS, al que se agregará un Bono Contra el Hambre para cada habitante, con el fin de estimular la demanda y reactivar la economía.
Rindió homenaje al pueblo boliviano por su fortaleza inquebrantable y su confianza en la candidatura del pueblo y su conciencia, por lo que no se dejará confundir como ocurrió en octubre de 2019 con algunos sectores ante el golpe de Estado contra el Presidente Evo Morales.
“Somos los únicos que podemos garantizar que las empresas estatales y privadas se desarrollen normalmente y sigan trabajando en beneficio del país y lo vamos a hacer para garantizar el empleo y los ingresos”, añadió.
Reiteró su respeto y solidaridad con los policías de base y soldados que son parte del pueblo y negó que el gobierno del MAS vaya a actuar contra ellos en venganza, como afirman mentiras que sus jefes les inculcan, según mensajes que ha recibido.
Arce se solidarizó también con los periodistas que han hecho públicos casos de corrupción del régimen de facto, por lo que recibieron presiones y amenazas a ellos y sus familias y les garantizó que el MAS respetará la libertad de expresión.
La Paz, 15 de octubre 2020.
Crónica Digital / Prensa Latina.