Según fuentes de Carabineros, los participantes en el acto solo estaban autorizados para concentrarse en la céntrica Plaza de la Dignidad (Baquedano) pero no para realizar una marcha.
Los asistentes, entre 600 y mil según distintas fuentes, se congregaron en la emblemática explanada, donde también expresaron demandas del pueblo mapuche por la recuperación de sus territorios ancestrales y la libertad para presos políticos de esa comunidad indígena, la más numerosa de las diez reconocidas en Chile.
También denunciaron lo que calificaron de montaje de hechos violentos ocurridos en localidades del sur del país, en los cuales –aseguran- se ha querido implicar a miembros de las comunidades originarias.
Los manifestantes decidieron posteriormente marchar por la Alameda Bernardo O´Higgins en dirección a la Plaza de los Héroes pasando por frente a la fachada sur del palacio de La Moneda, lo cual fue impedido por las fuerzas policiales empleando carros lanza agua, a la altura del cerro Santa Lucía.
En ese lugar algunos desconocidos comenzaron a romper las aceras para lanzarle los pedazos de concreto a las fuerzas policiales e incendiaron una parada de ómnibus, entre otros destrozos.
Los altercados conllevaron el desvió del tránsito de vehículos por un amplio tramo de la Alameda, principal arteria de esta capital, y el cierre temporal de al menos dos estaciones del metro.
En tanto, desde La Araucanía, el vocero del Consejo de Todas las Tierras, Aucán Huilcamán, recordó que el Estado de Chile debe saldar la deuda histórica con los pueblos indígenas si quiere que haya paz en esa región del sur del país.
En declaraciones con motivo de esta fecha, Huilcaman señaló que el Gobierno actual, tiene tres grandes cuestiones que resolver para el pueblo mapuche: esclarecer el crimen de genocidio cometido en lo que se denominó ‘pacificación de La Araucanía’, resolver el tema de los territorios y recursos usurpados, y restañar los daños a la cultura mapuche.
Santiago de Chile, 13 de octubre 2020
Crónica Digital/PL