La tercera parte de los trabajadores de la salud en Chile sufre síntomas depresivos de moderados a graves, a causa de la pandemia de COVID–19, asegura un estudio elaborada por cuatro universidades del país junto con el Colegio Médico (Colmed).
La investigación analiza el impacto de la emergencia sanitaria en el estado psicológico de quienes se enfrentan a la enfermedad, con el propósito de proponer medidas para mitigar esa situación.
La investigación se realizó desde mediados de mayo hasta principios de julio, en pleno auge de la pandemia en el país, y abarcó a 36 centros de salud en los que fueron contactados dos mil 500 trabajadores, desde directivos, médicos y administrativos, hasta personal de limpieza y choferes de ambulancias.
El sondeo reveló que el 31,4 por ciento de los entrevistados mostró síntomas depresivos de carácter moderado a grave expresados mayormente, en insomnio u otros trastornos del sueño, problemas de apetito, falta de concentración y cansancio.
También, aunque en menor cuantía, reflejaron falta de concentración en acciones como leer o ver televisión, inquietud, decaimiento e incluso sensación de fracaso.
Rubén Alvarado, académico de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, explicó que para la investigación también resultaron importantes los efectos que pueden existir a mediano y largo plazos, por lo cual resulta necesario tomar medidas rápidas para proteger la salud mental de los trabajadores de la salud.
Estas deben desarrollarse en los niveles regionales, locales, incluso en los mismos centros de salud, puntualizó el especialista.
Jaime Sapag, académico de la División de Medicina Familiar y Salud Pública de la Universidad Católica, señaló que las cifras “muestran la realidad de estrés y sobrecarga que está enfrentando el personal de salud y el impacto progresivo que implica sobre su salud mental”.
Por ello es de suma urgencia tomar todas las medidas “para prevenir, contribuir al cuidado de los equipos, detectar precozmente, evaluar y brindar atención integral al personal que lo requiera”, puntualizó.
En el estudio participaron el Colmed, la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, la Escuela de Medicina de la Universidad Católica, la Universidad Central de Chile y la Universidad de O’Higgins.
Santiago, 10 de septiembre 2020.
Crónica Digital / Prensa Latina.