Córdova, quien hoy cumple 104 días de huelga de hambre líquida, anunció esa decisión el jueves -lo que pudiera deteriorar aún más su ya grave estado de salud-, luego que la Corte Suprema de Justicia rechazara un recurso de amparo presentado por su defensa.
Con ese mecanismo se pretendía que el machi pasara parte de la pena de cárcel de 18 años que cumple desde 2014, en arresto domiciliario total en su comunidad, sobre la base de lo establecido por el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre pueblos originarios, del cual el estado de Chile es signatario.
En un mensaje de audio, este viernes el machi dijo que ‘debo entregarle mi último mensaje a solo horas de iniciar la huelga seca, como una forma de lograr mi descanso físico en esta tierra, pero como aquel gobernante no tiene suficiente sabiduría en resolver los distintos conflictos sociales, por no estar a la altura, finalmente me matará’.
La situación de Córdova y otros 26 presos mapuches también en huelga de hambre ha despertado numerosos apoyos en el país e internacionalmente.
La víspera, a pesar de la prohibición de reuniones debido a la pandemia de Covid-19, cerca de un centenar de personas se manifestaron en la Plaza de la Dignidad (Baquedano), centro de las grandes movilizaciones que estallaron en octubre de 2019.
Los participantes, con carteles en respaldo de la causa del pueblo mapuche y a los huelguistas, fueron desalojados con carros lanza agua por fuerzas de carabineros, que detuvieron a varias personas.
La situación en las regiones de La Araucanía y Bío Bío viene desde hace semanas luego que comuneros mapuches en apoyo a los huelguistas ocuparan varias alcaldías, lo que terminó en fuertes enfrentamientos entre indígenas, fuerzas policiales y civiles que pretendieron desalojar por su cuenta a los comuneros.
En tanto, desde el gobierno, incluido el presidente Sebastián Piñera solo ha habido tibias referencias de disposición al diálogo, pero sin ninguna propuesta concreta.
En un hecho que encendió aun más las alarmas, dirigentes de la Federación de Dueños de Camiones del Sur (Fedesur) se reunieron el pasado lunes en el palacio de La Moneda con el ministro del Interior, Víctor Pérez, a quien, en una especie de ultimátum, señalaron que estarán en ‘estado de alerta’ ante las acciones del Ejecutivo para controlar la situación.
Incluso el presidente de la Fedesur, José Villagarán, dio como plazo esta semana, y ‘si el gobierno nada hace, los camioneros vamos a ver la fórmula de arreglar el problema de inseguridad que tenemos’, amenazó.
Santiago de Chile, 15 de agosto 2020
Crónica Digital/PL
