Contra los pronósticos catastrofistas del gobierno de Sebastián Piñera, el retiro de fondos de jubilación por millones de ciudadanos es evaluado hoy como un balón de oxígeno para la economía de Chile.
La reforma constitucional impulsada por la oposición, que establecía la posibilidad de retirar hasta el 10 por ciento de los ahorros de los cotizantes en las empresas Aseguradoras de Fondos de Pensiones (AFP) era rechazada a raja tabla por el Ejecutivo, y su aprobación por el Congreso se convirtió en una sonada derrota política para La Moneda.
Pero ahora el propio ministro de Economía, Lucas Palacios, quien en su momento dijo que Chile se convertiría en una república bananera si se aprobaba esa iniciativa, admitió que el dinero proveniente del retiro de fondos de pensiones “está comenzando a reactivar la economía”.
Más aún, expresó que incluso esa medida, que ha permitido a millones de familias disponer de recursos para enfrentar la crisis económica y social agudizada por la pandemia de la Covid-19, también está influyendo en las expectativas de futuro.
Según prevén analistas financieros, en ese sentido las previsiones para el año de la contracción del producto interno podrían disminuir hasta en tres puntos porcentuales debido al estímulo que representa para el consumo interno el empleo de ese dinero por las familias.
Según dijo ahora Palacios, “a nosotros no nos gustaba mucho este proyecto porque tiene una contrapartida muy costosa, que es el tema de las pensiones, y eso va a ser un problema que hacía adelante vamos a tener que resolver. Pero tiene efectivamente un impacto positivo, porque es una inyección del liquidez que activa el consumo doméstico”.
Economistas han explicado que siempre las pensiones que otorgan las AFP han sido más que insuficientes, y que a la larga la extracción del 10 por ciento de esos fondos, no va a significar un peso demasiado oneroso para los futuros jubilados.
Según datos de la Superintendencia de Pensiones (SP), hasta el martes último habían sido entregados a los solicitantes un total superior a los cinco mil millones de dólares en más de tres millones 675 mil operaciones, correspondiente a la primera cuota, de dos establecidas en el proceso de entrega de fondos.
La SP señaló además que en las casi dos semanas que lleva el proceso, ocho millones 545 mil 306 personas realizaron sus solicitudes para acceder al retiro parcial de sus fondos, lo que representa el 77 por ciento de los afiliados al sistema de pensiones.
Santiago de Chile, 13 de agosto 2020
Crónica Digital/PL