La ciudad estuvo en el centro de las noticias en los últimos días tras la decisión de la administración de Donald Trump de enviar allí agentes federales con el argumento de proteger edificios y monumentos, luego de casi dos meses de protestas contra el racismo.
Ese despliegue resultó objeto de numerosas críticas, sobre todo tras difundirse reportes de que esos oficiales estaban deteniendo a manifestantes sin causa probable, mientras usaban uniformes y carros sin identificar, lo cual llevó a las autoridades locales a denunciar que las fuerzas federales estaban intensificando los enfrentamientos en Portland.
Los diarios The New York Times y The Washington Post indicaron que lo sucedido en esa urbe de Oregón energizó las protestas que comenzaron a nivel nacional a raíz de la muerte del afronorteamericano George Floyd a manos de la policía el 25 de mayo en Minneapolis, Minnesota.
Una de las manifestaciones más intensas de este sábado tuvo lugar en Seattle, Washington, donde los enfrentamientos entre los participantes y las fuerzas del orden dejaron un rastro de ventanas rotas y personas que sufrían las molestias del gas pimienta en sus ojos.
El Departamento de Policía de Seattle declaró disturbios y usó armas no letales en un intento de dispersar a una multitud de aproximadamente dos mil personas en el vecindario de Capitol Hill que asistían a una protesta del movimiento Black Lives Matter (Las vidas negras importan).
Mientras tanto, en Austin, Texas, un hombre fue asesinado anoche a tiros mientras marchaba con un grupo de manifestantes. ‘Alguien que muere mientras protesta es horrible. Nuestra ciudad está conmocionada’, expresó en un comunicado el alcalde Steve Adler.
En tanto, en Omaha, Nebraska, las movilizaciones se enfocaron en llamar la atención sobre la muerte de James Scurlock, un afronorteamericano asesinado por un hombre blanco dueño de un bar.
Asimismo, en Los Ángeles, California, los manifestantes se enfrentaron con oficiales frente al juzgado federal del centro, y videos de los hechos mostraron a personas que rompían ventanas y lanzaban botellas de agua a los agentes, después de que, según dijeron, la policía les disparó proyectiles, reportó el Times.
Washington, 26 julio 2020