El caso de Antonia Barra una vez más remece a la sociedad en su conjunto. Estos últimos días y con motivo del inicio del juicio de su abusador, se sigue develando el profundo arraigo del patriarcado y machismo que aún predominan en los distintos niveles del espectro social, en el sistema judicial, en los medios de comunicación.
A raíz de los argumentos que se han presentado en este caso, un grupo de diputadas de oposición lideradas por Karol Cariola redactó una carta pidiendo al Senado aprobar a la brevedad el proyecto de ley que lleva por nombre “Sin consentimiento es violación”, iniciativa que fue despachada por la Cámara de Diputadas y Diputados hace un año atrás -en julio de 2019-, cuando fue aprobada por unanimidad con 116 votos a favor.
En el documento las parlamentarias critican que “la violación de una mujer en nuestro país es un hecho que pone en tela de juicio el comportamiento de la víctima, exigiéndole transitar en un largo camino para encontrar justicia y reparación. La falta de oposición, la inexistencia de resistencia frente a la agresión genera un principio de consentimiento que permite que abusadores puedan evadir su responsabilidad”.
Agregan que “Antonia sufrió porque no pudo denunciar, porque se culpó, porque la culparon, porque bebió, porque no se cuidó. Hoy una vez más se discute acerca de lo mismo, si cumplió o no con una conducta de repeler la agresión para determinar que existió violación. Es decir, su familia lucha por obtener justicia ante el suicidio producto de la grave vulneración a su integridad, libertad sexual, situación que vivimos las mujeres cada vez que se normaliza la violencia que contraviene todos nuestros derechos”.
El proyecto de ley “Sin consentimiento es violación” busca incorporar un elemento ausente en el Código Penal respecto de la tipificación del delito de abuso sexual y nivelarlo a estándares internacionales. En la moción parlamentaria -presentada por las diputadas comunistas Karol Cariola y Camila Vallejo-, se establece que la inacción o falta de resistencia de la víctima, no constituye una manifestación de consentimiento para una relación sexual. Esto, debido a que actualmente el Código Penal sólo considera como delito de violación los casos donde la víctima usa la fuerza como resistencia o si está en condiciones que la incapacitan para defenderse.
En la misiva las diputadas exigen que la Cámara Alta apruebe a la brevedad el proyecto mencionado anteriormente, señalando que “no necesitamos solo muestras simbólicas de preocupación cada vez que violan y matan a una mujer sino que clamamos por voluntad real”.
Y finaliza: “no permitiremos que otra mujer deba guardar silencio por ser catalogada de “loquilla”, no permitiremos que todos los abusadores queden impunes porque no tenemos miedo, porque no queremos seguir viviendo en un Estado patriarcal que nos culpa, violenta y sepulta”.
Si bien esta tarde se hizo pública la citación de la Comisión especial encargada de tramitar proyectos relacionados con la mujer e igualdad de género del Senado, donde se establece que dicha instancia presidida por la senadora Adriana Muñoz (PPD) comenzará la discusión de este proyecto el próximo jueves como segundo punto en tabla, aún queda un largo proceso para que sea despachada por la Cámara, por eso el llamado de las parlamentarias es a tramitar con urgencia esta iniciativa.
La carta fue firmada por las diputadas Karol Cariola (PC), Camila Vallejo (PC), Claudia Mix (COMUNES), Marcela Hernando (PRSD), Maite Orsini (RD), Camila Rojas (COMUNES), Cristina Girardi (PPD), Gael Yeomans (PCS), Marisela Santibáñez (PC), Catalina Pérez (RD), Andrea Parra (PPD), Maya Fernández (PS), Carmen Hertz (PC), Natalia Castillo (RD) , Carolina Marzán (PPD), Pamela Jiles (PH), y Jenny Álvarez (PS).
Santiago de Chile, 25 de julio 2020
Crónica Digital/PL