Por Rafael Calcines Armas
El disgusto del presidente de Chile Sebastián Piñera por la falta de apoyo de sus propios partidarios, aumenta hoy la percepción sobre la magnitud de la crisis que afecta a la coalición de gobierno Chile Vamos.
El viernes, el mandatario se reunió con su gabinete casi al completo para analizar la derrota sufrida el jueves cuando la Cámara de diputados aprobó -con respaldo de legisladores de derecha-, debatir un proyecto para retirar ahorros de las empresas Aseguradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que el Ejecutivo rechaza por completo.
Según trascendidos, Piñera habría expresado a sus ministros que “la situación de Chile Vamos no da para más”, al tiempo que reclamó mayor unidad a los partidos que lo respaldan, llamándolos a “defender nuestras convicciones”, y enfrentar lo que desde La Moneda se califica como populismo.
En la votación del miércoles, unos 13 diputados de los partidos Renovación Nacional (RN) y Unión Demócrata Independiente (UDI), se abstuvieron o votaron a favor del proyecto de la oposición.
Esto disgustó a parte de sus correligionarios, al punto de que ocho diputados de RN anunciaron su renuncia a la bancada, pero la disidencia puede ampliarse al senado, donde al menos dos senadores de derecha ya dijeron que apoyarán la iniciativa.
La crisis llevó incluso a que La Moneda suspendiera hasta nuevo aviso el comité político que Piñera realiza cada lunes con los presidentes de los partidos de Chile Vamos.
Para analistas, el resultado de la votación y la crisis en Chile Vamos son resultado de la incapacidad del gobierno de responder satisfactoriamente en la ayuda a millones de nacionales que padecen la crisis económica y social agudizada por la pandemia de Covid-19.
Para Pamela Figueroa, cientista política y académica de la Universidad de Santiago, “el Gobierno está enfrentando una gran crisis política que se va a expresar en el debilitamiento de su apoyo ciudadano y el de su coalición”.
Añadió que eso da una oportunidad “para que la oposición, si se coordina y se expresa de manera unida, pueda establecer un nuevo liderazgo con miras al desarrollo de políticas y propuestas para salir de la actual situación que se encuentra el país”.
Por su parte, el doctor en Ciencias Políticas René Jara, considera que la situación no solo demostraría las fricciones al interior, sino también el debilitamiento progresivo del Gobierno de Sebastián Piñera.
Opinó que la declaración de Piñera de que la situación en Chile Vamos no da para más, es también un llamado al orden, que para muchos analistas llega un poco tarde, “en la medida que, finalmente, lo que se está viendo es el debilitamiento casi terminal del Gobierno”.
Con respecto a la próxima votación del debatido proyecto en la cámara alta, consideró que “probablemente el Senado va a aprobar esto y tratará de traspasar el problema al Presidente que, como última figura, puede utilizar el veto presidencial”.
Pero añadió que “si el presidente Piñera decide utilizar el veto, cuando las dos Cámaras se han manifestado a favor de la medida, sería un suicidio político”.
Santiago de Chile, 11 julio 2020
Crónica Digital/PL