Por Rafael Calcines Armas
El gobierno de Chile actualizó al alza en su web oficial la cifra de fallecidos por Covid-19, lo que acentúa hoy aún más las preocupaciones por los efectos del SARS-Cov-2 en el país.
Ahora, la cantidad de muertos es dos mil 190 luego que la víspera el ministro de Salud, Jaime Mañalich, reconociera que 653 decesos no habían sido incluidos en las estadísticas.
El ministro dijo que se determinó incluirlos tras revisar las bases de datos del Registro Civil y de los exámenes de PCR hechos en todo Chile.
Asimismo explicó que esa revisión se hizo a principios de la semana pasada, cuando se empezaron a sumar a la cifra de decesos las personas que morían con síntomas de Covid-19 pero tenían pendiente el resultado del examen PCR.
“Esto nos lleva -concluyó- a la necesidad de reconocer, de acuerdo a las definiciones que ha hecho la Organización Mundial de la Salud en marzo y en abril, en asignar como posibles casos de muerte asociadas a Covid-19 un número adicional de 653 personas fallecidas”.
Esta no fue la única mala noticia, pues además, el país presentó este domingo las peores cifras desde el inicio de la pandemia de Covid-19, con seis mil 405 nuevos contagios y otros 96 fallecidos en un día, según el informe oficial del Ministerio de Salud.
Con ello, la cantidad de infectados se elevó a 134 mil 150, lo cual mantiene al país en el
tercer lugar en América Latina en ese indicador, solo superado por Brasil y Perú.
Otro dato que comienza a preocupar a los especialistas es el aumento del número de contagios en algunas regiones del país, que hace pensar en la expansión de la pandemia más allá de la región Metropolitana, que concentra los peores números en todos los indicadores.
En la última jornada correspondieron a Santiago 89 de los 96 fallecidos, proporción que se ha mantenido y que a estas alturas comienza a poner en dudas que esté cerca la victoria en la llamada “batalla de Santiago” como lo ha definido el gobierno, sino todo lo contrario.
Esto lo corroboran además recientes estudios, los cuales indican que la cuarentena total en la capital del país y seis municipios circundantes, que ya va por su tercera semana, no ha dado los resultados esperados.
Los especialistas advierten que para que sea efectiva, esa medida debe implicar una reducción de la movilidad de las personas por debajo del 30 por ciento, pero según los estudios en casi todas las comunas de la urbe esta se comporta por encima del 50 por ciento y en algunas sobrepasa el 90.
Ello obedece, advierten, a una baja percepción de riesgo por parte de la población, a la deficiente fiscalización por las autoridades del confinamiento de las personas y a la necesidad de miles de salir a trabajar para poder sobrevivir, a riesgo incluso de contraer el virus, lo que refleja crudamente la precariedad en que vive gran parte la gente.
Santiago de Chile, 8 junio 2020
Crónica Digital/PL