Al menos 68 reclusos y 81 funcionarios de Gendarmería están contagiados de Covid-19 en la cárcel de Puente Alto, en esta capital, denunció el director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Sergio Micco.
Tal situación ha provocado tensiones al interior del establecimiento penitenciario, donde el domingo último ocurrieron altercados por protestas de los reclusos en uno de los bloques del presidio, que reclaman mejor atención sanitaria.
Según informes de prensa Gendarmería dispuso la aplicación de 300 exámenes de Covid-19 para aplicarlos a presos y gendarmes de ese boque y otras dependencias de la cárcel, donde el INDH apreció la falta de elementos de protección necesarios tanto para los presos como para el personal médico.
Micco denunció que en su visita al presidio apreciaron que el personal médico es mínimo, con solo una enfermera y tres paramédicos.
Por su parte, Beatriz Contreras, jefa metropolitana del INDH, confirmó que se están aplicando los exámenes para detectar el coronavirus SARS-Cov-2 y se han aplicado otras medidas, pero son «insuficientes ante la magnitud de la situación que se vive al interior del penal».
Consideró preocupante que después de dos semanas de que el INDH denunciara la falta de personal médico en el penal, este aún no cuenta con un médico, y el equipo de salud es muy pequeño para la cantidad de población penal y de funcionarios contagiados o con sospecha de estarlo.
El INDH señaló además que fuera de esa y otras cárceles se producen aglomeraciones de familiares sin los resguardos ni el distanciamiento físico recomendado, y sin el control necesario para ingresar paquetes a sus familiares privados de libertad.
La pasada semana causó gran impacto en medios sociales y políticos un informe de la Corte Suprema que califica como una bomba de tiempo la situación sanitaria y de hacinamiento de las cárceles del país, agudizada por la pandemia de Covid-19.
Santiago de Chile, 21 de abril 2020
Crónica Digital/PL