El Partido Comunista de Chile criticó que pese al avance de la crisis sanitaria el gobierno carece de un plan integral para enfrentarla y de medidas drásticas y claras, como recomienda la experiencia internacional.
En una extensa declaración, el PC señala que han sido las organizaciones sociales, sindicales y gremiales, las alcaldías y el pueblo en general quienes se han adelantado a exigir soluciones, que el gobierno ha implementado sólo parcialmente, sin tomar la medida de fondo de una cuarentena nacional que la inmensa mayoría reclama.
El PC considera que por la experiencia internacional, la participación directa y efectiva del Estado, con programas de contingencia integrales, es un factor de primera importancia, pero el gobierno chileno, acorde a su conducta, pretende encausar soluciones en los marcos del sistema neoliberal, con la menor participación estatal posible y de la sociedad civil organizada.
Denuncia que la crisis la están soportando principalmente los trabajadores, mientras la pequeña y mediana empresa, que ofrece mayor cantidad de puestos de trabajo, está en vías de sufrir un descalabro total.
A juicio del Partido Comunista las medidas de apoyo a las pymes “son mezquinas y superfluas, se necesita de una intervención estatal real. Se necesita de una Mesa de Trabajo, entre estos empresarios, el gobierno y los trabajadores con la finalidad de proteger el empleo en este sector”.
La declaración señala que se ha recrudecido el temor al contagio del coronavirus y el temor a perder el trabajo, que es usado como un arma para sacar ventajas por empresarios inescrupulosos que ofrecen entre rebajar el sueldo o el despido.
El texto llama también la atención sobre lo que ocurre en las cárceles y en las casas de acogida de adultos mayores, donde ya se han detectado contagios.
Para los adultos mayores la situación puede tornarse dramática, como ocurre en otros países, donde por la saturación de los servicios de salud están siendo dejados de lado en los cuidados, mientras que los presos políticos en prisión preventiva tras el estallido social, están recibiendo un castigo injusto, denuncia la declaración.
El texto señala que son múltiples los problemas que empiezan a agobiar a las familias, entre ellos el desmedido aumento de precios de productos y servicios, junto a la ola de despidos y la baja de sueldos.
La declaración advierte que ante la cercanía de una recesión muy profunda, resulta necesario un gasto fiscal agresivo con una inversión pública significativa e inyectar mayor liquidez a la actividad económica, pero el gobierno no tiene esa mirada y persiste en imponer su agenda propia sin escuchar ni al parlamento ni a la opinión pública.
Finalmente llama a la oposición y organizaciones sindicales y sociales a exigir medidas más de fondo contra la Covid-19 y asumir un compromiso ante centenares de miles de familias golpeadas por la crisis, para la reconstrucción de la economía y la normalización de la vida, despojándola del neoliberalismo, fortaleciendo la democracia con una Nueva Constitución y nuevo proyecto de desarrollo”.
Santiago de Chile, 2 abril 2020
Crónica Digital/PL