El Gobierno de Donald Trump arremetió con desesperación al constatar que su estrategia contra Venezuela se derrumbaba al normalizarse institucionalmente la Asamblea Nacional con la elección legítima de una nueva Junta Directiva, compuesta en su totalidad por opositores, pero que se han apartado del camino trazado por la Casa Blanca en torno a Juan Guaidó.
En efecto, la nueva directiva de la Asamblea Nacional, se juramentó encabezada por Luis Parra, procedente del partido opositor Primero Justicia, como presidente para el período legislativo 2020– 2021. Como primer vicepresidente fue juramentado Franklyn Duarte, del Comité de Organización Política Electoral Independiente (COPEI), tradicional colectividad socialcristiana. Asimismo, José Gregorio Noriega (Voluntad Popular, partido fundado por Leopoldo López) es el segundo vicepresidente y Negal Morales de Acción Democrática (AD), antiguo partido socialdemócrata, es el secretario.
De acuerdo a los congresistas opositores que participaron en la generación de la nueva Junta Directiva, Guaidó se ausentó de la sesión luego de constatar que no contaba con los votos necesarios para ser electo presidente de la Asamblea Nacional y, de aquella forma, continuar sustentando la idea de que es “presidente encargado”, conforme a la estrategia desestabilizadora de Estados Unidos. Por ello, mientras la mayoría de los parlamentarios opositores participaba en el procedimiento, Guaidó y sus partidarios protestaban frente a la sede del órgano legislativo y alegaban que se les había impedido ingresar.
Tras la juramentación, Parra convocó para mañana martes 7 de enero a la primera sesión del órgano legislativo: “Hoy queremos abrirle la puerta al futuro de este Parlamento”, expresó desde el podio del hemiciclo.
La composición de la nueva Junta Directiva fue propuesta por el diputado opositor José Brito (del partido Primero Justicia), ante la ausencia deliberada de Guaidó y sus seguidores a la sesión de juramentación. Con anterioridad, Brito acusó a Guaidó de abandonar la gestión parlamentaria para dedicarse a consolidar una estructura de poder personal y señaló que su desempeño al frente del Legislativo se caracterizó por su incompetencia, incapacidad y desmedidas ansias de poder.
Denunció a su vez la injerencia de congresistas de Estados Unidos, quienes se comunicaron con legisladores venezolanos para que respaldaran una propuesta alternativa. Asimismo, se refirió las denuncias sobre corrupción que hiciera el exembajador de Guaidó en Colombia, Humberto Calderón, sobre una malversación de fondos de la “ayuda humanitaria” que ingresaría desde Cúcuta el 23 de febrero del año pasado.
El Vicepresidente de Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, mostró evidencias sobre la manipulación ejecutada por Juan Guaidó frente a la instalación de la nueva Junta Directiva de la Asamblea Nacional.
A través de su cuenta en la red social Twitter, Rodríguez publicó una fotografía en la que se observa a diputados opositores que acompañaban a Guaidó a la instalación del Parlamento. “Preguntan ¿por qué sale @jguaido (Juan Guaidó) saltando una reja? Respondo: porque necesita la foto (…) De haber querido y tenido los votos hubiera entrado por la puerta. Como Stalin (González). Como (Juan Pablo) Guanipa. Como (Henry) Ramos Allup. Y como la mayoría de diputados opositores que votó por Parra”, escribió Rodríguez en Twitter.
Stalin González, Juan Pablo Guanipa y Henry Ramos Allup son connotados congresistas de la oposición al Gobierno de Nicolás Maduro.
Luego de su juramentación, Parra denunció las trabas impuestas por el presidente saliente, Guaidó, para realizar la elección, por no alcanzar los votos necesarios para ser reelegido. “Al diputado Juan Guaidó nadie le impidió entrar, por su propia voluntad decidió quedarse fuera porque le faltaban los votos para su reelección”, aseveró.
“Él le mintió al país, a la comunidad internacional y llevó a la nación a un callejón sin salida. Sólo uso al pueblo para consolidar su posición de poder”, señaló. Dijo que la excusa de que no le dejaron entrar para no asistir es una estrategia para no reconocer su fracaso, pero recalcó: “Se acabó la época en que usaban justificaciones para crear el caos”.
Mientras tanto, el recién juramentado como segundo vicepresidente, Noriega, aseguró que la nueva directiva realizará una gestión sin tutelajes, al servicio de los venezolanos. Precisó al respecto que es momento de reconciliar al pueblo venezolano y evitar actos violentos o confrontaciones para solucionar los conflictos que urgen atender en el país. Asimismo, el primer vicepresidente del Parlamento, Duarte, llamó al diálogo y a la unidad nacional para enfrentar la situación que vive Venezuela en materia económica, producto del bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por el Gobierno de Estados Unidos.
La nueva Junta Directiva recibió el respaldo de 81 votos de los 150 diputados presentes, de los cuales 30 pertenecen a la oposición del país.
El Canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, rechazó el intervencionismo de la Administración Trump en los asuntos internos de Venezuela y sus instituciones. A través de un mensaje difundido en la red social Twitter, afirmó que la nación bolivariana es un país independiente y soberano, lo cual el Gobierno de Estados Unidos no termina de entender.
“Deberían ocuparse del desastre que pretenden provocar con nuevas guerras por petróleo”, escribió el jefe de la diplomacia venezolana en la plataforma comunicacional.
En otro mensaje, el Canciller denunció las reacciones de gobiernos “satélites en la región”, sobre la situación del país, al recalcar que “se trata del mismo guión, falso e injerencista”.
Los congresistas opositores disponibles al diálogo y el camino institucional recibieron toda clase de presiones y amenazas en caso de no reelegir a Guaidó. Ello no fue suficiente para que lograran el objetivo de perseverar en el camino de la desestabilización “Se acabó la confrontación entre los poderes”, subrayó Parra.
Caracas, 6 de enero 2019.
Con información de la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina.
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