El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva salió en libertad tras cumplir 580 días de prisión política en la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba, capital del sureño Estado de Paraná.
Bajo cánticos “Lula libre” y banderas de diferentes tendencias políticas y movimientos sociales, Lula recibió el caluroso saludo de miles de personas que, desde horas tempranas de este viernes, se concentraron frente a la sede policial en Curitiba en espera de la salida del fundador del Partido de los Trabajadores.
Este viernes, la defensa del exdirigente obrero presentó ante la justicia el pedido de libertad teniendo en cuenta la decisión adoptada la víspera por el Supremo Tribunal Federal que consideró inconstitucional la prisión tras la condena en segunda instancia y no agotarse todos los recursos legales. El juez federal Danilo Pereira Junior firmó la autorización para que el exmetalúrgico abandonara la sede policial en Curitiba.
Poco antes, Lula había manifestado su propósito de construir un proyecto de país para todos los brasileños. “El PT (Partido de los Trabajadores) nunca ha tenido un momento tan bueno para mostrar su fuerza. Ocúpate del PT y yo me iré de aquí (la cárcel) y me dedicaré a cuidar de Brasil”, dijo recientemente Lula en un mensaje confidencial a Márcio Macêdo, vicepresidente de la organización política, y José Guimarães, diputado federal.
Una vez en libertad, Lula agradeció a los militantes de la Vigilia Lula libre y a todos los que permanecieron a su lado durante los 580 días que cumplió de prisión política. “No pensé que en el día de hoy podría estar conversando con hombres y mujeres que durante 580 días gritaron Buenos días Lula, Buenas tardes Lula, Buenas noches Lula; no importara que estuviera lloviendo, que hiciese 40 grados, cero grados, todo el santo día ustedes fueron el alimento de la democracia que yo necesitaba”, afirmó desde una tarima en la ciudad de Curitiba.
“Ustedes fueron el alimento de la democracia. Ustedes eran lo que yo necesitaba para resistir”, señaló frente a cientos de personas, poco después de salir de la sede de la Policía Federal de la capital del sureño estado de Paraná. Apuntó que muchos “trabajaron para criminalizar la izquierda”, en alusión a sus acusadores y parafraseó la histórica frase que “no encarcelaron a un hombre, quisieron matar las ideas”.
La presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, comunicó que tras su libertad, Lula desea agradecer a la Vigilia Lula, “abrazar y agradecer a las personas que han estado allí durante 580 días sin dejarlo solo. Él piensa que esto es muy significativo e importante”.
Después de la reunión con la Vigilia, Lula continua a la localidad ABC (Sao Paulo), donde comenzó su lucha política, para volver a entrar “en su vida pública en el Sindicato de Metalúrgicos. Encontrará amigos y militancia y hablará con todos”, explicó.
Brasilia, 8 de noviembre 2019
Crónica Digital / Prensa Latina.
