En la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de diputados, se abordó la autorización de excavaciones en Juan Fernández para la polémica búsqueda del tesoro – encabezada por el holándes Bernard Keiser- en el parque nacional del archipielago. Tras escuchar a la presidenta del Colegio de Arqueólogos de Chile, Itaci Correa, y al Director Nacional de Conaf, Juan Manuel Rebolledo, se acordó oficiar al organismo y también a la SMA para que explique porqué se autorizó la búsqueda del tesoro al aprobar el protocolo de acuerdo firmado entre CONAF y el historiador, y si existen razones para generar alguna eventual invalidación de ese acto administrativo.
El diputado de Convergencia Social, Diego Ibáñez, integrante de la comisión, dijo que “concordamos en que la búsqueda de este tesoro parece que no cumple con las condiciones de una investigación científica, y las excavaciones con maquinaria pesada que se pretenden realizar van a generar un impacto ambiental relevante en un parque nacional, que además es reserva de la biósfera. Por eso necesariamente la introducción de la rextroexcavadora debe pasar por el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, algo que no ocurrió y quedan dudas del porqué, si acaso operó el lobby de los privados sobre las instituciones públicas, y porqué se firmó este protocolo de acuerdo. Y en esa es línea es importante que se puedan investigar las posibles ilegalidades, de CONAF y el SEA, a la hora de otorgar la RCA y los permisos para la búsqueda del supuesto tesoro”.
Por su parte, la presidenta del Colegio de Arqueólogos de Chile, Itaci Correa, pidió que mediante la Comisión de Medio Ambiente se fiscalice Juan Fernández para “reconocer el estado de avance de las excavaciones, y si es posible, parar la introducción de maquinaria en una excavación de características arqueológicas”. Correa reconoció que el historiador Keiser, “está legalmente autorizado para efectuar labores por el SEA pero la consulta no fue realizada a los organismos técnicos”.
La solicitud del Colegio de Arqueológos, según detalló Correa, se funda en que “este famoso tesoro son en realidad restos arqueológicos, están amparados bajo la ley 17.288. Además es efectivamente una visión de carácter comercial, con fines de lucro, y por tanto, no debió haberse otorgado el permiso en su origen”. Destacó también que “hay modificaciones sustanciales al proyecto, como introducir maquinaria a un espacio que es un parque nacional, maquinaria que probablemente podría afectar sitios arqueológicos circundantes; y ninguna de estas consultas de pertinencia han sido presentadas ante organismos competentes como el Consejo de Monumento Nacionales”.
Finalmente indicó que “tenemos el resquemor que la introducción de maquinaria pesada podría afectar a sitios arqueológicos aledaños como la cueva Selkirk, o al mismo sitio que está intentando excavar el señor Keiser, porque en una metodología arqueológica – que es lo que está autorizado por la RCA- es incompatible hacer un rescate científico, sistemático con una máquina, de restos arqueológicos. No hay garantía de poder salvarguardarlos con esta maquinaria.”
El Director Ejecutivo de Conaf, señor José Manuel Rebolledo, en tanto, realizó una cronología respecto de los cinco proyectos de misión introducidos por el holandés desde el año 1998 (sin éxito en hallazgos), hasta la actualidad, abordando también el cuestionado protocolo de acuerdo alcanzado entre CONAF y Keiser este año, permitiendo retomar las obras para la búsqueda del tesoro.
Rebolledo argumentó que se tomó la decisión de autorizar y de firmar el protocolo de trabajos de sondaje en el parque nacional “teniendo presente que la actividad se generaría en una superficie de 400 metros cuadrados (20 x 20), y también que el proyecto cuenta con la autorización medioambiental pertinente del SEA -ratificado por la SMA- lo que ha sido determinante para resolver el ingreso al lugar, posterior a las dos negativa entre el año pasado y este”.
El director nacional de CONAF, agregó que “finalmente firmamos el protocolo que salvarguarda por sobre los requerimientos del SEA y la SMA,de manera de asegurar no solo los requerimientos medioambientales, sino también los propios de CONAF en un cualquier parque nacional o area silvestre protegida.”
Por otra parte, la motonave Iorana, que trasladará la maquinaria pesada (retroexcavadora) de Bernard Keiser, desde el puerto de Quintero hasta Juan Férnandez, está a la espera de aprobar inspecciones para poder zarpar con destino al archipielago.
Santiago de Chile, 8 de octubre 2019
Crónica Digital