El 80 por ciento de los dos millones 700 mil hogares construidos hasta hoy por la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV), es asignado a familias vulnerables y de bajos ingresos económicos.
El ministro de Hábitat y Viviendas, Ildemaro Villarroel, notificó en un balance que pese a las restricciones por el bloqueo comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, el ritmo de la edificación de inmuebles por parte del Estado venezolano se mantiene.
Asimismo, destacó que los sectores más vulnerables han sido beneficiados gracias a que el Gobierno logra conjugar variables económicas con las capacidades de organización del Poder Popular. “Cerca de 10 millones de venezolanos tienen techo propio, gracias a la GMVV”, añadió.
Villarroel explicó que una de las estrategias de protección gubernamental para garantizar el acceso a los hogares obedece a la evaluación crediticia que se realiza sobre la base del ingreso familiar, así como, el Subsidio Directo Habitacional.
El titular precisó que el plazo máximo de pago para la adquisición de una casa es de 35 años, y las cuotas mensuales ordinarias no superarán el 35 por ciento del ingreso mensual familiar.
Recientemente, el Presidente de la República, Nicolás Maduro, aprobó la criptomoneda nacional El Petro, como mecanismo para regir todas las compras, intercambios y financiamientos de viviendas.
El mercado inmobiliario del país sudamericano cambió cuando el comandante Hugo Chávez aseguró que “el problema de la vivienda no tiene solución en el capitalismo, aquí lo vamos a solucionar con socialismo, y más socialismo, vivir viviendo, para eso nació la GMVV”.
Villarroel enfatizó que mientras la actividad de construcción de casas en las principales economías del mundo muestra una tendencia a la baja –un mercado que según Oxford Economics se reducirá hasta en 2,2 por ciento de su crecimiento para 2020–, la Gran Misión Vivienda Venezuela se consolida como el proyecto de construcción más importante de la región.
Caracas, 10 de julio 2019
Crónica Digital / Prensa Latina.