Reafirmó que China pide a las firmas domésticas cumplir con las normas de las inversiones internacionales, pero también reclama un entorno propicio y sin barreras para que desarrollen sus negocios en otros países.
Asimismo, Lu se manifestó en contra de las posibles restricciones a la adquisición de productos y servicios a las compañías Dahua y a Hikvision, esta última la principal proveedora del mundo de equipos de videovigilancia y seguridad.
Según reportes de prensa, Washington planea incluir a esa corporación china en la misma lista donde insertó a Huawei y a sus filiales para obligarla a soliciten autorización gubernamental cuando quieran comprar tecnología doméstica.
No obstante, Hikvision aseguró que ese movimiento no tendría gran impacto porque la mayoría de sus proveedores de chips radican en China.
Las acciones de la Casa Blanca caldean la guerra comercial que declaró al gigante asiático y desestabilizó los mercados financieros, la confianza de los inversores y los pronósticos de crecimiento de la economía mundial.
El duelo implicó un alza mutua de aranceles sobre las importaciones de ambas potencias, cuyos consumidores serán quienes llevarán la carga más pesada en sus bolsillos.
Beijing, 22 mayo 2019
Crónica Digital /PL
