Los condenables y lamentables hechos ocurridos recientemente en el Liceo Darío Salas, dan muestra una vez más de lo inútil que resulta -sobretodo en un espacio educativo- enfrentar la violencia, originada en una sociedad cada vez más desigual, con la respuesta represiva, también cada vez más violenta, sin tomar ninguna consideración en las causas del problema y queriendo sanar la enfermedad solo atacando los síntomas.
– Cortes de calle, encapuchados, overoles, bombas mólotov, interrupción de clases, agresiones, desafío a la autoridad, amenazas, etc.
– Fuerzas policiales movilizadas en las afueras de los liceos todos los días, ingreso de carabineros de FFEE a los liceos, arbitrariedad y abuso en el uso de la fuerza y no cumplimiento de protocolos, bombas lacrimógenas lanzadas al cuerpo y por doquier, carro lanza aguas actuando directamente para agredir y no para dispersar cuando sea estrictamente necesario, detenciones indiscriminadas y ahora también allanamientos y detenciones nocturnas (son acciones conducentes a ejercer la autoridad a través de la fuerza y el terror).
– Aula Segura (que no da seguridad para nada, salvo la expulsión de estudiantes declarados culpables incluso antes de la investigación interna de aplicación de manual de convivencia) es el aliado estratégico de equipos directivos incapaces de gestionar desde lo pedagógico el entendimiento, la participación y la inserción social. Directores transformados en fiscales y consejos de profesores en verdaderos verdugos. Expuestos, lejos de su función docente, a tener que dar veredictos.
Se busca “eliminar el problema” amedrentando y/o excluyendo al alumno de su comunidad, descartándolo como si fuera residuo desechable y no un niño-adolescente en etapa de formación inserto en el sistema educativo.
La grave situación de riesgos en la que estuvieron expuestos trabajadores de la educación y toda la comunidad escolar, nos muestra que la reconstrucción de una sana convivencia escolar es un proceso que no es independiente de las grandes contradicciones de nuestra sociedad, donde incluso ante grandes delitos cada día se ve cómo el rigor de la ley es aplicado sólo a los más desvalidos, mientras los poderosos gozan de total impunidad.
El refuerzo de todo el sistema escolar público, donde el acento esté puesto en un proceso educativo integral, formador de personas críticas, creativas y conscientes de sus deberes y derechos, educados en el respeto, la tolerancia a la frustración y en la diversidad, sujetos a verdaderos principios democráticos de participación y comunidad, podrán dar pasos lentos, pero seguros, a una convivencia escolar y social sana y positiva.
Sin una real intervención, asignación de recursos, equipos interdisciplinarios y un plan que se plantee seriamente el desafío de esa sana convivencia a nivel de comunidad educativa con inclusión para los buenos resultados pedagógicos y con el liderazgo docente y directivo necesario para ello, seguiremos tropezando con la misma piedra… y esa piedra, seguramente, será lanzada por un niño donde el sistema educacional y la sociedad fracasaron.
Presidenta de CORPADE – Coordinadora de Padres y Apoderados por el Derecho a la Educación.
Santiago de Chile, 21 de abril 2019
Crónica Digital
Pero si después de una nefasta gestión en el Barros Borgoño, llega como directora la misma mujer que me persiguió ofreciendo informes en contra mía, porque dormía, porque hablaba o porque pensaba distinto, si fué capaz de expulsar a estudiantes de 4to medio en el mes de Octubre, fué capaz de humillar a sus colegas degradándolos de nivel en esto también es cómplice Dios que llevó a esos jóvenes justo al Darío Salas , en donde llega “ella” de directora, mi awelita diría: “justicia divina” yo creo que cosechas lo que siembras, el mandato de ese tipo de gente no considera el diálogo y es justamente lo necesario para la destrucción de la Educación Pública. Que pena por ella, lo pensé y lo dije.
Doña Carola, jajajajja no podí ser tan chanta, todos te conocemos. Ahora dirigente del colegio de profesores (comunal Santiago), procapucha. Ha sido sacada de varios liceos de la comuna,como por ejemplo Borgoño, Insuco, A24, IN y otros, ¿adivinen por qué?: En vez de llevar libros debajo de sus brazos, continuamente como ella dice, portaba una almohada y frazada para dormir. Era el hazme reir de los compañeres y alumnes ya que roncaba en el sillón del patio del Liceo, todo esto en horas en la que debió hacer clases en los cursos o realizar sus funciones docentes. Compañere con un desempeño profesional limitado y básico, con malos tratos, modales y vocabulario del tipo “COA”, es capaz de vender a sus propios colegas en beneficio de sus oscuros fines. Flor y ejemplo de dirigenta.