Parlamentarios, exministros y ex embajadores firmaron una declaración en que critican duramente la iniciativa del gobierno de Sebastián Piñera de crear una organización que sustituya a la Unión de Naciones Suramericanas.
Con el título “La improvisación es una mala consejera”, el texto además cuestiona en general la gestión del gobierno en política exterior y su posición en los asuntos internos de Venezuela.
Los 26 firmantes del documento señalan que el lanzamiento de Prosur, para lo cual se celebrará en esta capital una cumbre de varios presidentes del área el 22 de marzo, es la nueva bandera de la agenda internacional del ejecutivo encabezado por Piñera con el objetivo de ganar protagonismo en el continente.
Señala el texto que Prosur es “una proposición inconsulta, sin trabajo preparatorio, hecha de un día para otro. Es una simple ocurrencia”, cuyos efectos serán negativos, “no solo por la improvisación sino porque representa un ejemplo más de una mala práctica latinoamericana: crear instituciones para luego suprimirlas con el pretexto que no funcionan”.
Los firmantes consideran que la Unasur “presentó fallas estructurales y operativas que la condujeron a su eventual parálisis”, pero eso no debe ocultar sus éxitos en el período en que funcionó normalmente, con sus aportes a la solución de problemas en naciones del área, así como los resultados de los Consejos de Defensa e Infraestructura.
Añade que la situación en Venezuela “requiere, como pretendía Unasur, un mecanismo de coordinación política que garantizara la paz, la estabilidad democrática y la integración de la región” y para ello -considera- es necesario un intenso diálogo diplomático en el seno de una institucionalidad sólida y respetada, más allá de las opciones ideológicas de los gobiernos.
Al respecto puntualizan que “la convocatoria a la creación de Prosur no cumple con estas condiciones” y advierte que en diversos países invitados existe una seria duda acerca de las finalidades y eficacia de la organización, así como sobre su envergadura y respaldo internacional.
Asimismo considera que en Venezuela el riesgo de una intervención militar promovida y liderada por Estados Unidos continúa siendo real, por lo cual es vital “la confluencia regional de todos los demócratas de distinto signo político para condenar sin ninguna ambigüedad cualquier intento de intervención militar y velar por una salida pacífica y democrática”.
“Chile debe mantener una política independiente, según su tradición de política exterior, que mantenga fluidas relaciones con todos los poderes mundiales y que manifieste siempre la firme voluntad de integración regional y de zona de paz para el Continente”, subraya la declaración.
Los firmantes, constituidos en un “foro permanente de política exterior” expresaron su disposición a colaborar en la búsqueda de formas más eficientes de concertación política a nivel suramericano, así como la confluencia de iniciativas como las de México y Uruguay y de la Unión Europea que buscan una solución pacífica y que “ya han obtenido algunos pequeños pero significativos éxitos”.
Rubricaron esta declaración, parlamentarios como Isabel Allende, José Miguel Insulza y Francisco Huenchumilla; los ex cancilleres Mariano Fernández y Juan Gabriel Valdés; los ex ministros Adiana Delpiano y Sergio Bitar; ex embajadores y otros políticos de la oposición.
Santiago, 16 marzo 2019
Crónica Digital / Prensa Latina.