Cualquier lugar, ya se una pequeña isla, una gran ciudad o un pueblo de campo, está expuesto a las amenazas que el cambio climático representa para la salud de las personas, señala la infografía compartida por Guterres en la red social.
La sequía, las inundaciones y las olas de calor son más frecuentes, en tanto aumentan las enfermedades transmitidas por vectores como la malaria y el dengue al existir un ambiente de más calor y humedad.
De acuerdo con la OMS, el cambio climático afecta los determinantes sociales y ambientales de la salud: aire limpio, agua potable, alimentos suficientes y refugio seguro.
La sequía puede desestabilizar la producción de alimentos y esto derivar en hambruna para la población de regiones afectadas, las inundaciones pueden aumentar la exposición a enfermedades transmitidas por el agua y la contaminación hace mayor el riesgo de más alergias y asma.
Todo ello se hará sentir más en áreas con infraestructura de salud débil, principalmente en los países en desarrollo que serán menos capaces de enfrentar el problema, señaló la OMS.
En los últimos 50 años, las actividades humanas -en particular la quema de combustible fósil- han liberado cantidades suficientes de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero para atrapar calor adicional en la atmósfera inferior y afectar el clima mundial, destacó el reporte.
Los niveles del mar aumentan, los glaciares se derriten y los patrones de precipitación cambian, mientras los eventos climáticos extremos son cada vez más intensos y frecuentes.
Naciones Unidas, 27 de agosto 2018
Crónica Digital /PL