Pompeo explicó la nueva estrategia estadounidense de cara al país persa, que incluye una docena de condiciones antes de que Washington otorgue el visto bueno a cualquier nuevo pacto sobre el programa nuclear iraní, que según Teherán tiene fines pacíficos.
La lista de demandas incluye que las autoridades iraníes deben declarar detalles sobre el pasado de sus planes de investigaciones atómicas, detener el enriquecimiento de uranio y renunciar al reprocesamiento de plutonio, así como permitir acceso ilimitado a todos los sitios que los expertos norteamericanos deseen inspeccionar.
El funcionario aseguró que la administración del presidente Donald Trump está dispuesta a levantar sus sanciones si alcanza un tratado con Teherán que acabe de forma permanente, además, con sus sistemas de misiles balísticos y algunas actividades en Oriente Medio supuestamente contrarias a la seguridad nacional de Estados Unidos.
Además, Pompeo exigió el cese del respaldo iraní a la organizaciones Hizbulah y Hamas, así como el fin de la presencia de asesores y consejeros de la nación persa que están en Siria a solicitud del gobierno de Bashar Al Assad.
El jefe de la diplomacia estadounidense subrayó que Trump no quiere renegociar el pacto nuclear con Irán y prefiere llegar a un ‘tratado’ que sea ratificado por el congreso norteamericano.
Por otra parte, el canciller iraní, Mohammad Yavad Zarif, rechazó este lunes cualquier intento de discutir temas ajenos al acuerdo nuclear, de lo cual se les informó a los representantes de la Unión Europa, entidad que está en contra de la decisión anunciada por Trump el 8 de mayo pasado de retirarse del Jcpoa.
Washington, 21 mayo 2018
Crónica Digital/PL