En realidad, Estados Unidos castiga a Rusia por el fracasado ataque coheteril contra Siria el pasado 14 de abril, cuando fueron inutilizados 71 de 103 misiles lanzados, junto a Francia y el Reino Unido, en violación del derecho internacional, subraya.
De ello habla la inclusión en la lista de los sancionados al Centro de Preparación de las Tropas Antiaéreas y Coheteriles de Gatchinsk ‘Académico A.F. Mozhaisky’ y el Regimiento Coheteril 108 de las Fuerzas Armadas rusas, destaca la Cancillería.
Ello, probablemente, se deba al adiestramiento correcto de las fuerzas antiaéreas sirias que destruyeron gran parte de los misiles lanzados por los agresores occidentales, explica el ministerio ruso de Asuntos Exteriores.
Llama la atención que Estados Unidos decidió sancionar nuevamente a la Dirección General de Inteligencia del Estado Mayor ruso y a la compañía Rosoboronexport.
Al parecer, olvidaron que los habían castigado antes, sin llegar a amedrentarlos, apunta.
Washington mantiene su ilusión de que con presiones económicas y militares pueden obligar a Rusia a renunciar a la defensa de sus intereses propios y del apoyo a sus aliados, aclara el documento.
El afán de mantener por cualquier vía posible su dominación hegemónica en el mundo empuja a Estados Unidos a una política irracional y hasta peligrosa, advierte la Cancillería.
Solo podemos aconsejar a los políticos estadounidenses, ocupados en castigar a quienes osan mantener una línea independiente en la arena internacional, que de ninguna forma deben sobredimensionar sus fuerzas, afirma la dependencia rusa.
Este nuevo paquete de sanciones contra Rusia es una reconocimiento de facto de que el pasado 14 de abril las fuerzas antiáereas sirias golpearon directo en la diana, tras el ataque de las potencias occidentales, considera el comunicado.
Moscú, 10 de mayo 2018
Crónica Digital /PL
