El ministro de Defensa de Japón, Itsunori Onodera, declaró hoy que su gobierno desestimó la orden de derribar el misil norcoreano que sobrevoló su espacio aéreo porque no representaba una amenaza para esta nación.
Onodera indicó que los radares de las Fuerzas de Autodefensa de Japón registraron el vuelo del proyectil, pero como no había posibilidades de que cayera a tierra el Ejecutivo no dio órdenes de interceptarlo.
Además señaló que las características de vuelo sugieren que se trató de un misil de alcance intermedio Hwasong-12.
“Hemos registrado que del proyectil se desprendieron tres partes, pero los detalles aún están siendo analizados”, agregó.
Reportes preliminares indican que el artefacto cayó en el océano Pacífico tras recorrer una distancia de unos dos mil 700 kilómetros a una altura máxima de 550 kilómetros.
Dichas pruebas son realizadas por la República Popular Democrática de Corea (RPDC) en respuesta a los reiterados ejercicios militares, amenazas, provocaciones y sanciones que provienen de Estados Unidos, en contubernio con países como Corea del Sur y el propio Japón.
A pesar de que la RPDC solicita a esas naciones dejar de lado los intentos por derrocar a su gobierno y promover los diferendos entre las dos Coreas por encima del entendimiento, las medidas contra Pyongyang son cada vez más fuertes.
Corea Democrática insiste en que en tanto no cesen esas hostilidades no dejará de llevar adelante el desarrollo del misil balístico, única garantía de supervivencia de su sistema, soberanía e independencia.
Tokio, 29 de agosto 2017
Crónica Digital /PL