Por precaución, no hablaremos con nuestros activos de Marte durante ese período porque esperamos una degradación significativa en el enlace de comunicación y no queremos arriesgarnos a que una de nuestras naves actúe sobre un comando deteriorado, explicó Chad Edwards, gerente de comunicación de la NASA.
No obstante, los datos seguirán llegando de Marte a la Tierra, aunque se espera la pérdida o corrupción de algunos bits, por lo que la información se retransmitirá más tarde.
Washington, 18 julio 2017
Crónica Digital /PL