Tal aumento constituye el tercer incremento anual consecutivo de dicho indicador.
Stoltenberg admitió que pese al aumento del gasto militar, este año solo seis países miembros destinarán a dicho rubro el dos por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
El aumento del gasto militar de sus aliados es uno de los tradicionales reclamos de Washington en la OTAN.
En 2014, el entonces presidente Barack Obama consiguió que los miembros de la Alianza se comprometieran a aproximar su gasto militar nacional al dos por ciento del PIB en el plazo de una década.
Junto a Estados Unidos, sólo Grecia, Estonia, Reino Unido y Polonia cumplen con ese compromiso, pero otros países, como España (la segunda con 0,9 por ciento de gasto en defensa en 2016), piden que se tengan en cuenta otros criterios en el cómputo.
En una cumbre en Bruselas a finales de mayo, el presidente estadounidense, Donald Trump, mantuvo la presión.
Mientras, el responsable de esa organización reiteró que el alza anunciada para 2017 para los aliados de Washington representaría 12 mil millones de dólares, lo que elevaría el aumento del gasto militar en Europa y Canadá a los 46 mil millones de euros en tres años.
Los ministros de defensa abordarán esta cuestión durante su reunión prevista el 29 de junio, tras la incorporación a principios de junio de Montenegro como miembro de la OTAN.
Bruselas, 28 de junio 2017
Crónica Digital /PL