El gobierno de Chile anunció que entregará una inversión anual de alrededor de 63,6 millones de dólares a la región de La Araucanía, donde vive la mayor parte del empobrecido pueblo mapuche.
En sintonía con el Plan Integral para La Araucanía, presentado la víspera por la mandataria Michelle Bachelet, el ministro de Desarrollo Social Marcos Barraza ofreció algunos detalles del programa.
Una iniciativa que deberá ser aprobada dentro de una ley que se enviará al Congreso en 60 días.
Nuestro país requiere de una institucionalidad que permita a los pueblos indígenas tener una participación activa en la política nacional, que hasta el momento no los ha incluido, comentó Barraza.
Consideró que el panorama actual en la región de La Araucanía no responde exclusivamente a un problema de rezago en materia de inversión, fomento o superación de la pobreza, sino que también a ecuaciones institucionales y cambios políticos
El gobierno decidió entre otras medidas crear el 24 de junio como jornada festiva para conmemorar el Día de los Pueblos Indígenas de Chile.
La etnia mapuche, la mayor de Chile, recibió por primera vez un mea culpa del Estado, que
pidió perdón por los “errores y horrores” cometidos contra el pueblo originario.
En una ceremonia en el Palacio de La Moneda, la presidenta Bachelet se refirió también a los siglos de invisibilización de los mapuches.
“En mi calidad de Presidenta quiero solemne y humildemente pedir perdón al pueblo mapuche por los errores y horrores que ha cometido o tolerado el Estado en su relación con ellos o sus comunidades”, sentenció.
El pasado año por primera vez en la historia y por iniciativa de Bachelet, los distintos actores del denominado conflicto mapuche se sentaron en una Mesa de Diálogo encabezada por el obispo de Temuco (capital regional), Héctor Vargas.
“Hemos fallado como país, por eso hoy quiero pedir perdón al pueblo mapuche por los errores y horrores que se han cometido o tolerado en nuestra relación con ellos y sus comunidades”, remarcó.
Pueblo amerindio, primero consagrado a la caza y horticultura y luego forzado a la ganadería y la agricultura, fue sometido por Chile y Argentina a fines del siglo XIX en campañas militares de Pacificación de la Araucanía y Conquista del Desierto.
Estos primeros pobladores chilenos y de parte de Argentina, se distinguieron también por
su férrea rebeldía y capacidad de lucha frente a los conquistadores españoles, que terminaron despojándolos de sus territorios.
Pero la batalla por recuperar sus tierras no ha cesado desde entonces, y los 700 mil mapuches que aproximadamente habitan Chile en pequeñas comunidades en la pobreza, tienen enfrentamientos por la reivindicación de sus derechos.
Santiago de Chile, 26 de junio 2017
Crónica Digital /PL