Un día después, numerosos aviones de cubierta volaron por la ruta aérea cerca del cielo y aguas territoriales de Corea Democrática, perpetrando los entrenamientos de lanzamiento de bombas y asalto sorpresivo contra los objetos sobre la tierra de nuestro ejército, reseñó un comunicado de la oficina gubernamental.
Esto muestra claramente, en opinión de la RPDC, que el intento imprudente de Washington pasa realmente por la acción práctica.
… Todas las propiedades estratégicas de la Casa Blanca, incluso los portaaviones nucleares, están en el ocular de puntería de los potentes medios de ataque superpreciso de nuestro ejército, sentenció Pyongyang.
Si atentan aun en lo mínimo a nuestra soberanía y la dignidad, agregó el comunicado, nos veremos en la obligación de atacar los espacios terrestre, aéreo, marítimo y submarino.
Ayer, la RPDC confirmó la realización por parte de Estados Unidos y Corea del Sur de los ejercicios militares conjuntos Key Resolve y Foal Eagle de mayor envergadura de la historia, lo cual apunta a un peligroso agravamiento del conflicto coreano, en opinión de expertos.
Participan en ellos un gran número de fuerzas agresoras, incluyendo varios países satélites, y todo tipo de propiedades estratégicas.
Para perpetrar estos simulacros peligrosos, la Casa Blanca ya introdujo desde finales del año pasado en el sur de Corea más de seis millones de toneladas de municiones y armamentos, y tomó recientemente las medidas para la evacuación emergente de las familias de las tropas norteamericanas y los ciudadanos de su país permanentes en territorio surcoreano.
Las jugarretas de guerra nuclear realizadas históricamente por
Washington y Seúl devienen, según muchos analistas, la causa que llevó la situación de la Península Coreana a punto de explosión y empujó a la RPDC a actuar de manera intransigente.
En este momento también se concreta en el suelo surcoreano el
‘OPLAN 4D’ para el ataque preventivo a la RPDC y se perpetra
abiertamente el entrenamiento simulando el despliegue de THAAD contra
los países vecinos.
Sin embargo, Estados Unidos habla de maniobras ‘anuales’ y ‘defensivas’ para hacer frente a la posesión de arma nuclear de la RPDC cada vez que realiza en el sur de Corea los simulacros nucleares.
Esto, de acuerdo con observadores, no pasa de ser una artimaña para imputar a la RPDC la responsabilidad del empeoramiento de la situación de la Península Coreana y justificar su agresión.
Deviene el justo derecho a la autodefensa de un estado soberano
mantener el estado de alerta según la demanda de la situación muy
tirante y fortalecer por todos los medios el disuasivo de guerra para
aniquilar despiadadamente a los agresores, consideró al respecto Pyongyang.
Pyongyang, 15 marzo 2017
Crónica Digital /PL